Brooke y Paul estaban sentados en uno de los sillones de
una terraza. Estaban hablando tranquilamente, mientras el sol se
terminaba de poner. Entonces, Edward, Danniel, Lucas y Jonh
aparecieron. Por otro lado, Micaella, Lauren, Catherine y Angie.
-Chicos, vamos. -dijo Lauren.
-¿A dónde? -preguntó Paul, mientras sus amigos le
obligaban a levantarse. Entonces, le pusieron una bolsa en la
cabeza.- ¿Qué hacéis?
-Te casas mañana, hoy despedida de soltero. -le dijo
Edward.
Los cuatro guiaron a Paul hasta el lugar de su
despedida. Allí todos los chicos estaban, incluidos su padre y sus
cuñados. Cuando Paul llegó y le sacaron la bolsa todos gritaron.
-¡Sorpresa!
-¿Sorpresa? ¿Qué es esto? ¿Una fiesta de cumpleaños?
-se quejó Danniel, el fiestero.
-No sabíamos que gritar. -le dijo Cody.
-Vamos, Paul. -le dijo Lucas, empujándolo hacia el
interior del salón.
-Os dije que no quería despedida de soltero. -les dijo
Paul, aparentemente enfadado.
-Y nosotros te dijimos que nos daba igual. -le dijo
Edward.
-¡Cerveza! -gritaron a la vez Sammuel y Connor,
apareciendo con varias cajas de cerveza.
Todos gritaron y fueron a coger una. Se sentaron en una
mesa y comieron pizza. Paul pensó que no estaba tan mal: una noche
con amigos, bebiendo cerveza, comiendo pizza, hablando de deporte...
Pero entonces Lucas y Danniel se escaparon de la fiesta un segundo.
-¿Cólo sois dos? -les preguntó Lucas a las dos
mujeres que tenía delante de él.
-Con dos llegamos. Además, si quisieras más hubieras
pagado más. -le contestó una.
-Vale, vale, no pasa nada... -dijo Danniel, levantando
las manos. Sacó unos billetes y les pagó.- Aquí tenéis.
-¿El número catorce? -preguntó una de las chicas.
-Sí, sí, eso... -dijo Lucas.- Por allí al escenario.
Los chicos volvieron al salón y empezaron a hacer
señas. Todos los chicos los entendieron, menos Paul. Todos colocaron
las sillas mirando hacia el escenario y obligaron a Paul a hacer lo
mismo. De repente la música empezó a sonar con Madonna y su Like
a virgin. Las dos chicas aparecieron en el escenario y empezaron
con su numerito.
-¿Qué es esto? -preguntó Paul, sin poder despegar la
mirada de las chicas.
-¿Qué crees que es? -le dijo su padre.
-¡Papá! No mires que estás casado. -le dijo Paul.
-Cállate. -le dijo Bob, alejándose de él. Su sitio lo
ocupó John.
-¿Cómo estás, amigo? -le dijo con una sonrisa.
-Bien, supongo. Brooke me va a matar... -dijo Paul. John
le palmeó la espalda.
-No te preocupes, ellas tenían su propia fiesta. -le
dijo John.
-¿Qué quieres decir?
-Que acabo de ver pasar a sus chicos. -dijo John.
-Lo dices muy tranquilo para que tu novia esté allí...
-dijo Paul.
-¿Por qué no? Vamos, Paul, diviértete. -le aconsejó
John.
-Todavía queda mucho por hacer y me caso mañana...
-Tranquilo. Todo bajo control. -dijo John.- Uy, esta
canción les va que ni pintado. -dijo frotándose las manos.
Can't fight the moonlight empezó a sonar. Los chicos
gritaban y aplaudían y las chicas de vez en cuando les sonreían,
mientras bailaban. Cuando la canción paró de sonar, una de ellas
cogió el micrófono.
-¿Quién es el novio? -preguntó. Todos señalaron a
Paul y gritaron. Las chicas fueron hacia él y lo agarraron de los
brazos, pese a que él intentara resistirse. Lo sentaron en una silla
en el medio del escenario.
-¡Para el novio! -gritó la otra chica.
Lady Marmalade, era la canción perfecta y empezó a
sonar. Las chicas empezaron a bailar alrededor de Paul, bajo la
atenta mirada de todos. Edward fue el escogido para abrir la botella
de champán y así lo hizo, mojando a todos. El alcohol, la música y
los bailes de las chicas siguieron hasta altas horas de las
madrugadas. Muchos de ellos, borrachos, subieron a sus habitaciones.
Los últimos en irse fueron Edward, Danniel, Lucas, John, Sammuel y
Paul. Cuando las chicas abandonaron el salón, entonces ellos se
fueron a dormir. Edward, Danniel, Lucas y Paul se fueron a su
habitación compartida.
-¡Buen partido, Scott! -le gritó Edward a Danniel,
borracho.
-No grites... -le dijo Paul, riéndose a más no poder.
Borracho también.
-No encuentro la cama. ¡Me robaron la cama! -gritó
Lucas. La luz estaba apagada y no veían nada. Danniel palpó la
pared hasta que encontró el interruptor y encendió la luz.- Ah, no,
ya la devolvieron.
Todos se volvieron a reír. Paul los mandó callar con
un Shh... Pero se siguieron riendo en silencio. Hacía tiempo que no
lo pasaban tan bien. Los cuatro se dejaron caer en las camas,
cansados y vestidos. John se fue a su habitación, aquella que
compartía con Angie. Le costó abrir la puerta, el también había
bebido un poco de más. Cuando entró, encendió la luz y encontró
la habitación vacía.
-¿Angie? -preguntó, por si acaso. Al no recibir
respuesta, cerró la puerta y musitó mientras caminaba hacia la
cama.- Seguro que sigue de fiesta...
Sammuel abrió la puerta de su habitación, aquella que
supuestamente compartía con Esther. Tenía la esperanza de
encontrarla allí, pero la perdió cuando vio la habitación vacía.
Se quitó la camisa y los pantalones. Se dejó caer en la cama y se
durmió apenas la cabeza tocó la almohada.
¡Hola a todos! Bueno, como ya llevo la mitad de la novela, y como hago siempre, quería preguntaros cómo iba la cosa. ¿Qué es lo que más os gusta? ¿El personaje que más amáis y al que más odiáis? ¿Os está gustando o no?
Y una última cosa, un favor. Necesito que recomendéis el blog a mucha gente.
Un beso a todos.
Cris.~

Me encanta la nove, cada vez se pone mejor.. No hay un personaje que más me gusta, todos me parecen geniales, y en este momento a quien más odiaria es a esther que no llega!
ResponderEliminarY me cae mal Esther y la q me cae bn son Brooke y Mica
ResponderEliminarMássss Noveeeee!!!!!!