Las chicas, con lo que Caroline había escogido puesto, llegaron al bar. Era pronto, pero ya había gente. Le sonrieron a la camarera y ésta les señaló una puerta, indicándoles que podrían esperar allí. Bree llevaba su guitarra a la espalda. Peter las acompañó, y los cinco esperaron a que la hora llegara. Ésto lo supieron cuando el dueño los avisó. Peter acompañaría al que se encargaba de la música, mientras el dueño las presentaba y ellas subían al escenario. Se posicionaron de espaldas al público, como habían decidido, y esperaron a que la música empezara a sonar. Can't fight with the moonlinght empezó a sonar. Pero, antes de que Alexis pudiera empezar a cantar, la música se paró. Las cinco miraron a donde Peter intentaba solucionar el problema con el camarero, encargado de la música. Entonces, de repente, un hombre llegó, pulsó cinco botones y la música volvió a sonar. Esta vez no paró de sonar y las chicas pudieron cantar.
-¿Se puede saber que pasó? -le preguntó Lexi a Peter, cuando bajó
del escenario ya que les tocaba cantar a Caroline y a Bree la canción
de Stand by me.
-No tenemos ni idea. -dijo Peter.
-¿Y como lo arreglasteis? -les preguntó Charlotte.
-Nosotros no lo arreglamos. Fue aquel chico de allí. -dijo Peter.-
Vino, tocó cinco botones y listo, como por arte de magia. Pero
parecía que sabía lo que hacía.
Charlotte y Alexis, mientras sus compañeras cantaban, no pararon de
mirar al chico que había salvado su actuación. Después volvieron a
subir al escenario y se unieron a Carolien y a Bree para cantar las
cuatro juntas Every breath you take. Al público les estaba
encantando la actuación. Era un público vivo, con ganas de pasarlo
bien. Cantaban todas las canciones con ellas y bailaban en todas las
que podían. Las chicas de OOM se sentían afortunadas.
-¿Cómo os lo estáis pasando? -preguntó Charlotte. El público
gritó, dando a entender que muy bien.- Pues prepararos, porque ahora
llega una canción del musical Chicago. ¿Conocéis una canción
llamada All that jazz?
El público exclamó y Charlotte sonrió. Bree y Alexis, amantes de
todos los musicales, cantarían esa canción. Caroline y Charlotte no
podían entender la capacidad que tenía el público de bailar todas
las canciones. Después de esa canción, Charlotte se lució con I
wanna dance with somebody, de Whitney Houston. Esa canción era
una canción hecha para bailar. Por eso las tres chicas del grupo,
menos Charlotte, salieron y se mezclaron con el público para bailar.
Incluso Peter se animó a bailar con Caroline.
-Yeah, I wanna dance with somebody. With
somebody who loves me. -cantaba Charlotte, con una
sonrisa. Amaba esa canción. Ella nunca había soñado con un amor
para abrazarse, besarse o cogerse de la mano. Ella quería un amor
para bailar. Y esa canción representaba ese sentimiento a la
perfección.
No pudo resistirse y se unió al público para bailar. Ella bailaba
todos los géneros de la música bien. Bailó con Peter, con hombres
que no conocía, con mujeres a las que nunca había visto, con
camareros y camareras. Se lo estaba pasando tan bien, que no quería
que esa canción terminara jamás. Terminó bailando con sus
compañeras. Se abrazaron y volvieron al escenario.
-Señores y señoras, Lotte. Nuestra mejor bailarina. -dijo Caroline,
señalándola. Todo el mundo le aplaudió.
-Ahora para bajar un poco las pulsaciones, vamos a cantar una canción
más tranquila. -explicó Bree.- Para ser claros, esta es una de mis
canciones favoritas. No woman, no cry.
Se sentaron en unas banquetas, en el medio del escenario y la música
empezó a sonar. My feet, my only carruage.
Al cantar eso, las chicas se sonrieron. Everything
is gonna be alright. Esa frase expresaba como las cuatro
se habían unido, cuando estaban pasándolo mal. El público daba
palmas al ritmo de la música y ellas se levantaron para cantar el
final de la canción.
-Y, por último, -dijo Alexis, cuando terminaron de cantar la
duodécima canción. El público se quejó y las chicas se rieron.-
vamos a cantar una canción que se llama A hard day's night,
de The Beatles.
-Pero esta canción se la queremos dedicar a un hombre. El hombre que
salvó nuestra actuación hoy. -dijo Bree. Los focos iluminaron al
hombre que había arreglado el equipo de música cuando más lo
necesitaban.- Gracias.
El tema de The Beatles fue la última canción que cantaron esa noche
OOM. Cobraron la actuación y volvieron a su casa. Se acostaron y se
quedaron dormidas al momento, un día largo, un gran sueño. A la
mañana siguiente, los primeros en despertarse fueron Caroline y
Peter, que se sentaron en unas sillas plegables fuera de la casa
rodante. Allí tomaron el primer café del día.
-Buenos días, chicos. -dijo Bree, saliendo del automóvil,
frotándose los ojos.
-¿Cómo dormiste, Bree? -le preguntó Peter.
-La verdad es que muy bien. -dijo ella sentándose en una de las
piernas de Peter.
-Pete y yo estuvimos pensando... -dijo Caroline.
-¿Pensando? ¿Vosotros? -la interrumpió Bree. Peter se rió y
Caroline le dio un manotazo en su pierna al descubierto.
-Queremos ir a darle las gracias al chico que ayer salvó el show.
-dijo Peter.
-Y pedirle que se una a la gira. -añadió Caroline.
-Bueno, eso solo lo quiere ella. -aclaró Peter.
-Pues a mi me parece una buena idea. A lo largo de nuestra gira
podemos ir añadiendo gente a nuestro equipo y, finalmente, seremos
un gran equipo. -dijo Bree.
Peter se sorprendió de que Caroline no fuera la única que quisiera
unir a aquel chico a la gira. Cuando Alexis y Charlotte se
despertaron les explicaron la idea, y a ambas les parecía bien. Esa
misma tarde, volvieron al bar de la noche anterior y preguntaron si
alguien conocía al chico que les había salvado la noche. Nadie lo
conocía, pero una camarera se dio cuenta de que ese mismo chico
estaba sentado en una de las mesas, tomando un café. Las chicas,
acompañadas por Peter, se sentaron en la mesa y él las miró
sorprendido.
-¿Te acuerdas de nosotras? -le preguntó Charlotte.
-Claro, sois las chicas de OOM. Gran show el de ayer. -les dijo el
chico amablemente. Era un chico de unos veintipocos años, barba de
tres días, gafas grandes y bien vestido.
-Muchas gracias. -dijo sonriente Alexis.- Bueno, queríamos darte las
gracias personalmente otra vez.
-Y proponerte una cosa. -dijo Caroline, interrumpiendo a su prima.-
Estamos haciendo una gira, para salir adelante con nuestra banda.
Mientras la hacemos estamos componiendo una banda de verdad. Hace
poco incorporamos a Peter, nuestro mánager. -dijo señalándolo.- Y
ahora queremos incorporar nuestro equipo técnico. ¿Te gustaría
unirte a OOM? -ante la pregunta el chico se quedó a cuatros.
-Te pagaremos. Nos repartimos el dinero a partes iguales. -aclaró
Bree.
-Y podemos hacerte un sitio en la motor-home. -dijo Alexis.
-¿Qué nos dices? ¿Te unes? -dijo Peter.
-Sí... -dijo el chico, asombrado.
-¿Cómo te llamas? -le preguntó Alexis.
-Cory, Cory Blunt. -dijo él, emocionado.
-Yo soy Caroline Harrison.
-Bree Wilson.
-Charlotte Palme.
-Alexis Thomson.
-Y Peter Holbrook, el mánager.
-Bienvenido a OOM.

Me encanta que valla uniendose gente :)
ResponderEliminarMásss Noveeee!!!!!!