martes, 11 de marzo de 2014

Primera división.


Las chicas del equipo mayor de Duendes Verdes iban en el bus, camino a Brevard, Carolina del Norte, para jugar el último partido de la temporada. Cada una iba a sus cosas. Algunas escuchaban música, otras dormían, otras leían... Y después estaba Cassandra, que iba hablando con Goldman.

-¿Cómo lleváis a los chicos para la final? -le preguntó Harry Goldman.

-No se.. Solo queda una semana y no nos da tiempo de preparar todo lo que quería preparar. -dijo Cassandra.

-¿Qué os falta? -preguntó Goldman.

-Jugadas, no tenemos muchas jugadas y tengo miedo de que no llegue.

-Por favor, Cassandra. -se quejó Harry Goldman.- Os sobran cualidades para ganar al partido. ¿Y si perdéis qué? No pasa nada. Lo importante es el avance de los chicos y que disfruten jugando al baloncesto. -lo que él no sabía que todo el club estaba intentando lo imposible para dedicárselo a él.

-Siempre me acuerdo de una cosa que nos dijiste una vez... -dijo pensativa Cassandra.- Leonard Aniston te dijo que el año anterior habíamos perdido todo, que era imposible ganarlo todo ese año. Y tú le contestaste que por eso íbamos a hacerlo, porque era imposible.

-Y lo hicisteis. -dijo Goldman.

-Hoy lo vamos a volver a intentarlo. -le dijo Cassandra.

-A veces lo importante es intentarlo. -dijo Goldman. Cassandra sonrió y volvió a su asiento, al lado de Brianna.


-Es por allí. -le dijo Noel, señalando una carretera secundaria a Kayla.

No! No lo es. -le dijo Ryan.

-A ver, rápido. ¿Voy o no? -preguntó Kayla, poniéndose nerviosa.

Sí! -le gritó Noel. Entonces giró y fue por donde Noel le había indicado.

-No gritéis. -pidió Eric.

-¿Teníais que traer al niño? -se quejó Ryan.

Los cinco iban en el coche de Kayla. Ella iba al volante. Ryan, a su lado, de copiloto. En la parte de atrás, en el medio, Lucas en su silla; a la izquierda, Eric; y a la derecha, Noel. Los cinco iban a ver el partido, pese a que ninguna de las chicas lo supieran. Y, detrás de ellos, William, Mery, Molly, Leyda y Jared.

-¿Qué hacen? -preguntó William, mirando como el coche de Kayla dudaba si ir en un camino o en otro.

-Kayla está al volante, no se de que te extrañas. -le dijo Molly. Los cinco rieron.

Cuando el autobús llegó al pabellón las chicas se fueron al vestuario. Allí, se cambiaron con tranquilidad. Goldman golpeó la puerta y preguntó si podía entrar. Ellas ya estaban todas vestidas, así que el viejo entró y se sentó en uno de los bancos.

-Bueno, chicas. Ya se que a algunas de vosotras ya os dije esto, pero este sí que será mi último partido como entrenador. -dijo apenado.- Me alegro mucho de haberos entrenado. No habéis sido el mejor equipo que he entrenado, pero uno de los mejores sí. Hoy no espero ni la victoria ni la derrota. Solo quiero veros jugar al baloncesto como vosotras sabéis. ¿La capitana quiere decir algo? -le preguntó a Lilly. Ésta asintió y se levantó.

-Llegamos hasta aquí gracias a nosotros. A todos nosotros. -dijo incluyendo a Harry Goldman.- Y, porque nos lo merecemos, hoy vamos a triunfar. Y, como último partido de tu vida, haremos que estés orgulloso de nosotras, verdaderamente orgulloso. Así que ahora vamos a terminar de prepararnos, escuchar una canción que ha elegido Brianna y salir a ganar. -dijo Lilly.

Así lo hicieron. Se terminaron de preparar. Se peinaron unas a otras, vendaron sus puntos débiles, enrollaron la camiseta en las tiras del sujetador para que ésta sea más cómoda, ataron sus zapatillas... Brianna había escogido la canción de I love it, de Icona Pop. Después de esto, salieron a la pista y se pusieron a calentar.

Los chicos habían llegado y todavía quedaban quince minutos para que el partido empezara, así que esperaron fuera. Hacía algo de brisa, pero era agradable ya que el verano se acercaba y, con él, el calor. Pero en cuanto un grupo de personas llegaron animando al equipo enemigo y cantando se volvieron competitivos. Entonces, entraron en el pabellón animando a su equipo. El equipo de Harry Goldman, al escucharlos los miraron y sonrieron. Se sentaron en primera fila y miraron a su equipo calentar.

-¿Brianna sabía que ibas a venir? -le preguntó Jared a William. Éste negó.

-¿Y Cassandra?

-Tampoco. -dijo Jared.

-Menudos novios estamos hechos... -dijo riendo William. Chocaron sus manos y prestaron atención al partido que estaba a punto de empezar.

Las chicas de Duendes Verdes empezaron perdiendo. Pero de repente, con Brianna, Cassandra, Margarett y Lilly en el campo el equipo remontó. Kayla y Mery presumieron diciendo que ellas habían sido sus compañeras de equipo. En el descanso, las chicas se fueron con Goldman al vestuario y el resto se quedaron entre el público. Pero Kayla vio algo que llamó su atención.

-¿Abigail? -preguntó mirando a una mujer que se sentaba delante de ellos. Abigail era una jugadora de Duendes Verdes, ex-novia de Noel y enemiga de Mery. Al girarse y darse cuenta de que sí que era ella, Mery y Noel se miraron.

-¿Kayla? Mery, Ryan, Will, Eric... Noel... -el nombre de su antigua pareja lo dijo de una manera diferente. Y lo fue a abrazar fuerte. Noel incómodo, pidió ayuda con la mirada y Kayla lo entendió.

-Abigail, ¿cómo estás? -preguntó Kayla, separando a Abigail de Noel. La abrazó y después Abigail fue abrazando uno a uno, hasta que llegó a Mery.

-Mery... -le dijo con no un buen tono.

-Abigail... -le respondió ella, en el mismo tono.

-Noel, ¿qué es de tu vida? ¿Casado o soltero? -preguntó Abigail.

-Casado y con dos hijas. -se apuró a decir él.

-¿Y quién es la afortunada? -preguntó mirando a Mery.

-Tara. -dijo Noel.

-¿Tara? ¿Qué Tara?

-Tara Weber. -dijo Noel.

-¿La fotógrafa? -preguntó Abigail. Noel asintió. Después de una pequeña conversación con el resto se separó y se sentó con una amiga que la acompañaba. Las jugadoras volvieron a salir y Kayla llamó a Cassandra y a Brianna. Ellas se acercaron a hablar con su amiga.

-¿A qué no sabéis con quién acabamos de estar? -dijo Kayla. Sin esperar respuesta contestó.- Con Abigail.

-¿La ex de Noel? -preguntó Cassandra. Kayla asintió y sus amigas se rieron.

-Después nos cuentas todo con detalle. -le dijo Brianna. Cuando Kayla iba a volver a su sitio, Brianna la volvió a llamar.- ¡Kayla! Gracias por venir.

-De nada, amiga. -le dijo con una sonrisa.

El partido continuó y llegaron a los últimos quince segundos sin el balón y ganado de dos puntos. Goldman pidió un tiempo muerto y pensó en la estrategia.

-Vale, a pista: Brianna y Margarett. -las nombradas estaban sentadas en el banquillo hasta ese momento.- La jugada es la siguiente. Defendemos mujer a mujer, desde ya, y queremos quitarles el balón o, simplemente, que no tiren a canasta. Si robamos el balón que no nos lo quiten. ¿Claro? -todas asintieron. Gritaron el nombre del equipo y salieron a la pista.

Cassandra consiguió robar el balón con diez segundos en el marcador. Tenía que hacer algo, no podía quedarse con el balón sin hacer nada durante tantos segundos. Brianna sabía esto, así que corrió hacia ella y hizo un mano a mano. Seis segundos. Brianna se la dio a Lilly. Cuatro segundos, ahora sí que podían agarrar el balón y no soltarlo sin hacer nada. Lilly llevó el balón contra su barriga y lo agarró con fuerza. El pitido final sonó y Duendes Verdes volvía a primera división.

Las chicas lo celebraron, igual que el público. Había mucha gente de Bugle, lo que hizo que las gradas se quedaran vacías porque todos bajaron a celebrarlo. Brianna y Cassandra estaban abrazando a Harry Goldman, cuando Kayla llegó corriendo y se unió al abrazo.

Después del pequeño festejo, las chicas se fueron a duchar a los vestuarios. Lo que no se esperaban para nada era que toda la afición, amigos y familias estarían sobre la pista esperándolas. Cuando salieron las aplaudieron y ellas sonrieron. Cuando salió Harry Goldman, por detrás de ellas, los aficionados aplaudieron mucho más fuerte y las jugadoras se unieron.

-Enhorabuena. -les dijo Kayla a sus amigas, abrazándolas.

-Gracias, cariño. -le dijo Cassandra, dándole un beso.

-El año que viene te apuntas tú, ¿no? -le dijo Brianna.

-Ya veremos...

Las tres salían juntas del pabellón y el la puerta se encontraron con Eric acunando a su hijo que lloraba. Cassandra y Brianna miraron a Kayla, que al ver la escena sonrió.

2 comentarios:

  1. Que lindo la ultima escena :)
    Mássss Noveeee!!!!

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  2. Me encanta la nove!! Me mata de años Lucas que lo llevan a todos lados! No quiero que termine!!!!!!

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