41.Reabriendo el caso, parte 3.

-Pero, ¿por que mataron también a María y después a Pato? -preguntó Mariana.

-Lo que pudo pasar es que Pato empezó a averiguar cosas de los asesinos de los abuelos y ellos decidieron avisarle matando a su mujer. El dejó el caso, pero no se porque lo mataron luego.

-Lo mataron porque yo reabrí el caso de mis papás hace muchos años, el me pidió que lo cerrara, pero el siguió con las investigaciones. Seguro que llegó demasiado lejos y lo tuvieron que matar. Y ahora su hija se quiere vengar por algo que pasaron después sus papás... Pero ¿que?

-¿Alguién podría haber ayudado a Pato con esto? -preguntó Patricia.

-Cristina... -musitó Mariana. Las dos agarraron sus cosas y salieron de la comisaría. Mariana manejó esta vez hasta casa de su antigua jefa, que desapareció de convate después de la muerte de Patricio. Consiguieron su dirección y hacia allá fueron. Cuando llegaron se asombraron de ver una casa enorme con un jardín donde jugaban dos nenes chiquitos. Llamaron a la puerta y la cara de la mujer, mayor ya, cuando vió a Lali fue de aunténtico pánico.

-Mariana Espósito... -dijo ella.

-La misma. -afirmó Lali.- Ella es mi hija, Patricia. -la nombrada sonrió. Cristina las dejó pasar y se sentaron en el living.

-¿Pasó algo? -preguntó Cristina.

-No, solo queriamos hacerte unas preguntas y necesitamos que seas sincera... -la mujer más vieja asintió.- Pato, cuando lo mataron, ¿estaba estudiando el caso de mis papás? -preguntó Lali. Cristina dudó unos minutos, pero, finalmente, contestó.

-Si... -madre e hija se miraron y se pararon.

-Gracias Cris. Me alegro de verte... -dijo Lali iendo hacia la puerta casi corriendo seguida por su hija.

-Lali ¿volviste a la comisaría? -preguntó Cristina interrumpiedo su carrera.

-Si.

-Es la inspectora... -añadió Patricia. Cristina soltó una risita.

-¿Ocupas ahora mi despacho?

-No ese es el del otro inspector. El Inspector Lanzani. -dijo Lali.

-¿Peter es ahora inspector? -las dos mujeres asintió. Ahora se dirigió a Patricia.- Y si no me equivoco tu papá...

-Si. -dijo sonriente Patricia.

-Sos muy parecida a el. -añadió la más vieja.

-Pero tiene el carácter de Pato. -dijo Lali.

-Le hace honor al nombre. -dijo con una sonrisa Cristina. Finalmente las dejó marchar y madre e hija fueron a casa de Óscar. Que les abrió la puerta temeroso.

-¿Me quieren explicar que está pasando? ¿Por que vino Pablo histérico pidiendole a Alex que se llevara a Antonio lejos?

-Este hombre no sabe disimular... -se quejó Lali caminando hacia el despacho que era de Pato.

-Lali ¿que pasa? -preguntó otra vez Óscar.

-Casi tenemos a los asesinos de tu papá. -dijo Lali prendiendo la computadora de su hermano. Óscar al nombrar a Patricio se puso pálido.- Vas a estar bien si vienes con nosotras a comisaría.

-¿Y Lucía?

-Ella ya está allá. La fueron a buscar y ya está allá. -dijo Patricia leyendo un mensajito en su celular.

-¿Que buscan? -preguntó Óscar mirando la pantalla con su tía.- Leí todos los informes de papá.

-¿Te suenan los Colorado? -preguntó Patricia.

-Si, pero el caso no se llamaba Colorado...

-Le cambió el nombre para que nadie supiese nada... -dijo Lali, que conocía a su hermano como la palma de su mano.- ¿Como se llamaba?

-Se llamaba... -se quedó pensando unos segundos hasta que dió con la respuesta.- Caso Ahora o algo así.

-¡Caso Ahora! Lo tengo. -dijo Lali mandándole a la compu que imprimiera todo el caso.- Prepara tus cosas que te vienes para casa. -le dijo Lali.

Patricia y Óscar se fueron a recoger las cosas de el mientras Lali arreglaba lo del Caso Ahora. Los tres volvieron a la comisaría donde Peter las esperaba en la puerta.

-¡¿Donde se meten?! Llevo 15 minutos intentando hablar con ustedes. -se quejó.

-Fuímos a averiguar la dirección de Cristina, a casa de Cristina y a casa de Óscar. -resumió Lali corriendo hacia su despacho seguida por Peter. Patricia se quedó con Óscar, entonces Lucía apareció acompañada por Candela. Óscar y ella se quedaron con Candela mientras que Patricia volvió con sus papás.

-¿Carolina? -preguntó cuando llegó al despacho de su madre.

-Vuela en una hora y media. Eduardo la fue a llevar. -informó Lali.

-¿Alicia? -volvió a preguntar.

-Con tus abuelos. -dijo Peter.- Patri, ¿de donde sacaste el Caso Colorado?

-De la biblioteca que hay en el cuarto de los abuelos en la Mansión Espósito. -informó ella.

-¿Están todas las posibles víctimas seguras? -preguntó Lali refiriendose a su familia.

-No, hay dos que se resisten. -dijo Peter. Tanto su hija como su mujer lo miraron con cara de pocos amigos.- ¡Tienen que dejar esto! Nosotros nos vamos a encargar.

-Mirá bien, Peter. -su mujer se paró y se acercó a el con un dedo levantando, amenazante.- No me dejaron resolver este caso hace 22, no me dejaste ayudar cuando secuestraron a mi hija y ahora soy yo la que arreglar esto. No me jodas. -dijo hablando lento y claramente.

-Este caso está exponiendo tu vida y la de tu hija. -dijo Peter de la misma forma.- Está exponiendo la vida de mi mujer y mis tres hijas. ¿Como quieres que no te joda?

-Dos de tus hijas están a salvo. Tu mujer sabe lo que hace y...

-Y tu otra hija también. -se sumó Patricia.

-Entonces, no me dejen afuera. ¿Si?

-¿Donde está Dolores? -preguntó Patricia.

-Está en el calabozo. -dijo Peter.

-Voy a hablar con ella. -dijo parándose.

-Te acompaño. -dijo Peter agarrando a su hija por el brazo antes de salir miró a su mujer.- No te mueves de acá.

Padre e hija bajaron al calabozo y se pararon frente a la celda donde Rocío le curaba el brazo herido por Eduardo a la criminal. Rocío se despidió y los tres se quedaron mirando.

-¿Cuantos son? -preguntó Peter. Dolores soltó una risita.

-Que te lo voy a decir...

-Por tu bien... -amenazó Patricia.

-Solo les voy a decir una cosa. Nos quedan 6 Espósito y no vamos a para hasta eliminarlos. Quizá en este momento una esté en peligro...

Lali llegó corriendo al lugar.

-¡Peter! -el y la hija de ambos salieron corriendo atrás de Lali.- Ellos no saben que Alicia existe. Cuando secuestraron yo estaba embarazada. Ellos no saben que ella vive. Entonces la sexta víctima no es ella. Es...

-Tía Ana... -musitó Patricia. Lali asintió.

-Ok. Lucía y Óscar están acá con Candela. Carolina está con Eduardo. Yo voy a buscar a Ana y ustedes dos se quedan con Pablo.

Le regaló un beso en la cabeza a cada una y salió corriendo. Lali y Patri se giraron y se encontraron con Pablo y Nicolás sonriéndoles y pidiéndoles que se acercaran a ellos. Lali suspiró, sabía lo pesados que eran los dos y lo cabezadura que era Peter. Casi tanto como ella y su hija.

Lamento anunciar que he tomado una decisión... 

Voy a terminar #EntreMuertes. Pero no se preocupen todavía. Les quedan al menos 7 capítulos, espero. Tomé esta decisión ya que casi llevo 50 capítulos y creo que tengo que pasar página. Pero más novelas están esperando.

Un beso.

Cris.~