lunes, 8 de diciembre de 2014

XXXV.

Cuando el estribillo de I will always love you terminó, el confeti dejó de caer y empezó a sonar Dancing Queen de ABBA. Ryder paró el beso y miró a Lola.

-Lo siento, tenía que hacerlo. -dijo él. Se dio la vuelta y se fue dejando a Lola totalmente desconcertada.

-¿Así, sin más? -le preguntó Inés, interrumpiendo el relato de Lola.

-Espera, no terminé. Después, lo busqué y lo separé para hablar con él.

-¿Me quieres explicar qué pasó? -le dijo Lola.

-¿Con lo del beso? -preguntó Ryder.- Nada. -contestó indiferente.

-¿Cómo que nada? ¡Ryder, me acabas de besar! -dijo Lola, nerviosa.

-Sí, era la medianoche del treinta y uno de diciembre. -explicó él.

-Eso ya lo se. -dijo Lola, apoyando sus manos en la cadera.

-¿Qué quieres que te diga entonces? -preguntó Ryder.

-¿Solo lo hiciste por qué eres imbécil o...

-¿O si es por qué siento algo por ti? -terminó Ryder la pregunta de Lola.- Pues es lo segundo. Pero no te sientas obligada a nada, estoy acostumbrado al rechazo. -al ver la cara de Lola, añadió de inmediato.- Era broma, era broma...

-¿De verdad? -preguntó Lola.

-Sí.

-¿Desde cuando?

-¿Eso que más da, Lola? Es así y punto. Pero da igual. Sigo siendo tu amigo, además del otro escolta con el que juegas. -dijo despeinándola. Se iba a ir, pero Lola lo agarró del brazo y le devolvió el beso.

-¿Lo volviste a besar? -preguntó Inés, sorprendida.

-Varias veces. -añadió Grace, sentándose a su lado en la cafetería. Claire y Bella iban con ella.

Y ellas tenían una apuesta de con quién me iba a besar! -las acusó Lola.

-¿Y quién ganó? -preguntó Inés.

-Culpable. -dijo Isabella, levantando la mano. Todas menos Lola se rieron.

-Por cierto, Bella, te queda genial el pelo así. -dijo Claire. Isabella acababa de cortarse el pelo. Su larguísima melena rubia se quedó en una pequeña melena que apenas pasaba de los hombros.- ¿Por qué ese cambio de look?

-Año nuevo, look nuevo... -dijo Isabella, riendo.

Entonces, tres chicos empezaron a correr hacia la mesa y abrazaron por la espalda a Inés. Inés era la primera que se hacía ver desde su vuelta de España. Por eso la euforia de Cosmo, Logan y Thomas al verla.

-¿Cómo lo pasaste? -preguntó Thomas.

-Muy bien, echaba de menos a mi familia y a mis amigos. -dijo Inés, sonriente.

-Pero más nos echabas de menos a nosotros, ¿no? -dijo Logan.

-Por supuesto, Logan. -dijo Inés, abrazándolo.

-Este fin de semana jugamos, espero verte al 110%. -le dijo Cosmo.

-Al 200%. -contestó Inés.

Esa es la actitud! -le dijo Cosmo, los dos chocaron sus manos.

-¿Lola te contó que está con Rydr? -le preguntó Thomas.

-No estoy con Ryder. -dijo Lola comiendo.

-Sí, me lo contó. -dijo Inés, ignorándola.

-¿Te imaginas la cara del entrenador Forbes cuando se entere? -preguntó Logan. Lola paró de comer, se levantó y los miró.

-Escuchadme bien, mi padre no se puede enterar de esto. -dijo Lola, levantando el dedo índice.

-¿Por qué? ¿Es celoso? -preguntó Inés, riéndose.

-No, porque las bromas pesadas en casa se harían presentes y es insoportable. -dijo Lola.- ¿Os quedó claro? Mi padre no se entera de esto, jamás.

-Vale, vale, tranquila... -dijo Cosmo, riéndose. Ryder entró en la cafetería, cuando Lola estaba sentada otra vez. Al ver a Inés se acercó a ella sonriendo.

Española! -dijo al encontrarse con ella. Se abrazaron fuerte.- ¿Cómo estás?

-Muy bien, deseando volver a entrenar de una vez. -dijo Inés, sonriente.

-Así me gusta. Hoy toca el Eliminador y tengo que ganarle a alguien... -dijo Ryder. Inés lo miró desafiante.

-Eso es lo que tú te piensas. -dijo Inés, sonriente.- Voy a comer, que me muero de hambre.

-Vale. -dijo Ryder. Después se acercó a Lola y apoyó su mano en los hombros de ella. Se acercó a su oído y le habló.- Te espero después de comer en la puerta.

Lola asintió y él se fue con Cosmo, Logan y Thomas a la mesa del equipo de baloncesto. Después de comer, Lola y Ryder se miraron y salieron de la cafetería juntos. Se sentaron en un banco que estaba debajo de la puerta del instituto. A unos metros de ellos, llovía.

-¿Le contaste a Inés? -preguntó Ryder.

-¿El qué? -preguntó Lola. Ryder enarcó una ceja y ella se rió.- Sí, se lo conté. ¿Por qué? ¿Es un secreto?

-No, para nada. -dijo él.


-Bueno, así mejor...

1 comentario: