18.-Los nervios de la novia.

-¡Tengo la solución! -gritó Lauren, cuando volvió a su habitación. Llevaba en la mano el reproductor portátil de Esther. Lo conectó a un altavoz y miró a las chicas.- Cody me dijo que esto te ayudaba cuando estabas nerviosa.

Scarlett y Ellen estaban peinando a la novia. Catherine miraba para ellas y Micaella se secaba el pelo sentada en su cama y en silencio. Material girl empezó a sonar. Brooke sonrió y asintió con la cabeza. La primera en ponerse a cantar fue Ellen. Lauren no tardó en unirse y Scarlett tampoco. Brooke cantaba sentada delante del espejo y Micaella sonreía tranquila. Pero Catherine, seguía de brazos cruzados y dando golpes contra el suelo.

-Mucho mejor. Gracias, Lauren. -dijo Brooke, se levantó y la abrazó.

-Venga, os dejo la música mientras me sigo vistiendo. -dijo Lauren, entrando en el baño.

La siguiente canción fue Papa don't preach. Angie entró en la habitación y al escuchar la canción sonrió y empezó a bailar.

-Que ritmo tenéis por aquí. -dijo sonriente.

-No sabes tú cuanto. -dijo Micaella con una sonrisa.

Detrás de Angie, entraron Ava, Emma, Taylor y Emily. Todas estaban ya vestidas. Emily llevaba una falda con un estampado de leopardo -muy suave-, con una camisa marrón, una chaqueta blanca y un bolso marrón. Ava con un vestido azul marino, sin mandas, muy simple. Taylor un vestido agua marina, con una cinta en la cintura y una parte de abajo de mucho vuelo. Emma una falda blanca con un estampado azul y naranja, una camisa blanca -casi transparente-, muchas joyas y una cartera naranja pequeña. Angie, Angie llevaba un vestido de un color entre gris y azul, de encaje, con la espalda al descubierto y un bolso negro.

-¡Qué guapas, chicas! -dijo Scarlett, que conocía a todas las amigas de su hija. A Angie la acababa de conocer, pero le daba igual.

-Gracias, Scar. -dijo Ava, después de darle un beso en la mejilla.

-Chicas, me parece que estamos muchas aquí. ¿Por qué no vamos abajo? -propuso Lauren, saliendo del baño, lista.- Esther, Sammuel y Cody estaban preparando todo solos y todavía se tenían que vestir.

-Claro. -dijo Micaella.- Nos vemos luego, Brooke. -dijo despidiéndose de ella.

Brooke las saludó con la mano, a través del espejo. Solo se quedaron en la habitación Scarlett, Ellen y Catherine. Notaban los nervios de Brooke, pese a que Madonna seguía sonando.

-Ellen, ¿no me podrías peinar? Esto es un desastre. -dijo Catherine, mirándose al espejo y tocándose la cabeza.

-Sí, la verdad es que sí. Pero no te quería decir nada... -dijo Ellen. Scarlett y Brooke se rieron.- Pero vamos a mi habitación, así acabamos antes. -dijo Ellen, con una sonrisa.- Scarlett, ¿necesitarás ayuda?

-No, gracias, Ellen. Creo que a partir de aquí puedo seguir yo sola. ¿Tú necesitarás ayuda? -dijo Scarlett mirando a Catherine.

-No. Pero si Karen entra en mi habitación y la ve allí os llamo porque se matan... -dijo Ellen. Las dos se volvieron a reír y Ellen y Catherine las dejaron solas.

-¿Estás nerviosa, cariño? -le preguntó Scarlett, aun que ya sabía la respuesta.

-No, lo siguiente a nerviosa mamá. -dijo Brooke. Su madre se rió, mientras rizaba unos mechones de su pelo para que el recogido quedara más bonito.

-Tienes que estar tranquila.

-No estuve tan nerviosa jamás. Ni por los exámenes, ni cuando me operaron, nunca... -dijo Brooke.

-No se porque estás nerviosa. Paul es un chico estupendo. -dijo Scarlett.

-Por eso lo estoy. ¿Y si lo estropeo todo?

-Cariño... -dijo Scarlett, casi riendo.- No vas a estropear nada. Lleváis doce años juntos. Eso es un montón. Cuando yo me casé con tu padre llevábamos solo dos años saliendo.

-Mamá, es diferente. Ahora la gente no se casa tan rápido como antes. Y hay más divorcios.

-No te vas a divorciar de Paul. Después de esta boda no tendréis dinero para eso. -bromeó Scarlett. Brooke se rió, pero pronto volvió a la seriedad.

-Mamá...

-Disfruta, Brooke. Ahora os vais a casar, después tendremos una fiesta enorme, porque conociendo a los amigos de Paul y a los tuyos... Y por la noche os vais de Luna de Miel. -dijo Scarlett.- ¿Qué más quieres? ¿A dónde iréis?

-A Puerto Rico. -dijo Brooke con una sonrisa.

-¡El Caribe! -exclamó Scarlett. Brooke y su madre se rieron.- Esto ya está. ¿Qué te parece?

-Precioso, mamá. Eres una artista. -dijo mirándose al espejo.

-Vamos, ponte el vestido. Solo queda media hora. -dijo mirando el reloj.

Scarlett ayudó a Brooke a ponerse el vestido. Estaba bien doblado en una caja rosa, con el nombre de la tienda. Se lo puso y Scarlett la terminó de maquillar. Cuando ya Brooke se estaba echando el perfume, Cody entró en la habitación.

-¿Dónde está la novia? -preguntó con una sonrisa. Su hermana lo miró y le sonrió.- Caray... -dijo asombrado.

-¿Está o no está preciosa? -preguntó Scarlett.

-Es la novia más bonita que he visto en toda mi vida. -dijo Cody, abrazando a su hermana. Brooke estaba descalza, por eso a Cody le pareció extraña la altura de su hermana.- Si eres tan baja a mi lado, al lado de Paul... -bromeó él. Brooke le dio un golpe en el brazo.

-Ya me voy a poner los tacones. -dijo Brooke. Se sentó en la cama y se calzó. Su madre y su hermano se pararon delante de ella, a mirarla.- ¿Qué me miráis?

-Es el día de tu boda, acostúmbrate. -dijo Cody. Le dio la mano y la ayudó a levantarse.