miércoles, 20 de noviembre de 2013

UNO-Decimoctavo cumpleaños.




Diez, nueve, ocho, siete, seis, cinco, cuatro, tres, dos, uno! ¡FELIZ CUMPLEAÑOS! -gritaron todos los invitados a la fiesta. Aplaudieron y por orden se acercaron a felicitar a la cumpleañera, Elle Stuart.

-Ahora los regalos. -dijo Ian, el hermano pequeño de Elle. El joven Ian solo tenía siete añitos.

Todos corrieron a coger sus regalos y se acercaron por orden para entregárselos a Elle. Los primeros fueron sus mejores amigos. Vestidos, zapatos, álbums, pantalones... Después fue la familia, la primera fue su prima, Alexis Stuart. Le dio una pequeña caja de joyería. Ella la abrió y allí estaba un colgante precioso con un caramelo de adorno final.

-Muchas gracias, Alex. -las primas se abrazaron y entonces el resto de la familia se acercó.

-Esto es un regalo en común, para las dos. -dijo Candance, la abuela Candy.

-Estuvimos ahorrando desde el decimoctavo cumpleaños de Alex. -hace cinco meses.- Y fue idea de Ronald. -dijo Benjamin, el abuelo Ben. Ron, el hermano de dieciséis años de Alex levantó la mano.

-Veréis, -Ron se dispuso a explicar.- hace exactamente tres años escuché una conversación en casa de los abuelos. Vosotras estabais hablando de viajar y de visitar un montón de lugares. Entonces caísteis en la realidad y os disteis cuenta de que eso costaba mucho. ¿Os acordáis?

-Claro. -dijeron a la par las primas.

-Entonces, hace cinco meses, una semana antes de tu cumple, -le dijo a su hermana- se me ocurrió cumpliros vuestro deseo.

-Y desde entonces, ahorramos para regalaros esto. -dijo Darren Stuart, padre de Alex y hermano de Edward, padre de Elle.

Las primas recibieron un sobre cada una y la primera en abrirlo fue Alex. Sacó un billete de avión hacia Barcelona. Su prima la imitó.

-Barcelona es vuestro primer destino. -dijo Renee, madre de Alex y mujer de Darren.

-Lo escogí yo personalmente. -añadió Heather, madre de Elle.

-Os vais en dos semanas. -dijo Edward.

Las primas se miraron, miraron a su familia, se pusieron a gritar y abrazaron a su familia. Ahora solo quedaba, despedirse, dejar todo listo y empezar a viajar.


Una semana antes de viajar:

-Alex ¿ya tienes todo listo? -preguntó Suzanne, mejor amiga de Alexis. Estaban en la playa con el resto de sus amigos.

-No, todavía no, Sue. -dijo ella, buscando una goma del pelo, para que sus largos rizos dejaran de molestarle.

-¿Y cuando piensas empezar a hacerla? -interrumpió Joey, amigo de Alex.

-No se, cuando me apetezca. -dijo pasándose crema de sol en las piernas.- Por cierto, voy a ir a despedirme del equipo pasado mañana, me acompañas ¿no? -le preguntó a Suzanne, pivot del equipo de baloncesto.

-Si, claro. Pero como Emer -el entrenador- se ponga a llorar, me voy. -los tres rieron y entonces Peter y Oliver, parte del grupo de Alex, llegaron corriendo con una pelota bajo del brazo.

-Chicos, ¿un partido de football? -propuso Oliver. Los tres asintieron y salieron corriendo a jugar.


-Ellie, esto te lo llevas ¿no? -le preguntó Natalie, una de las mejores amigas de Elle.

-Claro que se lo lleva, Natty. -dijo Roselyn, otra mejor amiga de Elle.

-Rossie, pásame la cazadora de cuero que está en mi armario. -pidió Elle colocando su ropa interior en la maleta.

-Toma. -dejó la cazadora encima de la cama y entonces Ian se asomó por la puerta.

-Ellie, mamá pregunta si se van a quedar a cenar. -dijo desde la puerta.

-No, yo no. Pero gracias, Ian. -dijo Natalie.

-Yo tampoco, hoy vienen a comer mis primos.. -dijo Roselyn, revoleando los ojos.

Las dos mejores amigas de Elle se despidieron de ella en la puerta de su casa y ella se sentó con su familia a comer. Su madre hizo una rica lasagña y comieron entre risas.


Dos días antes de viajar:

-Alexis estás loca si piensas que te vas a llevar la tablet. -Ronald entró gritando en la habitación de su hermana.

-No te preocupes, no me la iba a llevar. Me llevo mi laptop. -dijo ella desde su cama, viendo la televisión.

-Menos mal... -dijo su hermano yéndose de su cuarto. Cuando su hermano se fue, sus compañeras del instituto entraron en su habitación. Ellas tres compartieron todo en el último año de instituto. Los amigos de Alex eran todos un año mayores y todos habían empezado la universidad mientras que ella terminaba la secundaria.

Naomi, Judith! -dijo sorprendida Alex.- ¿Que hacéis aquí?

-Vinimos a despedirnos de ti, tonta. -dijo Naomi.

-Esperad un momento. -se acercó a la puerta de su habitación y le gritó a su madre.- ¿Mamá nos haces la merienda?

-Tienes dieciocho años, Alex. Os la voy a hacer porque te vas, que si no te la hacías tu misma. -gritó desde la cocina Renee. Sus compañeras se rieron de Alex y se sentaron las tres en la cama.

-¿Y que vas a hacer con la universidad? -preguntó Judith.

-Me tomaré un año sabático y cuando vuelva haré la prueba de la universidad. -les explicó a sus amigas.

-¿Y que vas a estudiar? -preguntó Naomi que aspiraba a Medicina.

-No lo sé, quizá Matemáticas.

-Buena suerte... -dijo Judith. Las tres rieron y Renee llegó con la merienda.


Ellie! ¡Elle! -ella no lo escuchaba ya que le gustaba correr con los auriculares en sus orejas. El corrió hasta que la alcanzó y ella se paró y sacó sus auriculares.

-Ricky, ¿que hacés? -le preguntó a su ahora amigo y ex-novio, Richard.

-Me dijeron que te vas en dos días. -dijo intentando recuperar el aire de correr detrás de Elle.

-Si, mi prima y yo nos vamos a hacer una ruta turística por todo el mundo.

-¿Y en cuánto tiempo estaréis de vuelta? -preguntó Richard.

-En cinco meses.

-Bueno, espero que me escribes algún e-mail. -dijo antes de abrazarla.

-No te preocupes, tengo una larga lista de personas que quieren que les mande correos electrónicos tres veces al mes.

-Pues apúntame a la lista. -los dos rieron.- ¿Los correos también incluyen fotos?

-Una foto al mes. -avisó ella.

-Trato hecho. -dijo el antes de volver a abrazarla.

-Te vamos a echar de menos. Sobretodo yo.

-Lo se...


Día del viaje:

-Cuidados con los carteristas. -añadió Heather, antes de dejar que su hija y su sobrina se fueran de viaje.

-Y sacad muchas fotos. -siguió la lista Renee.

-Y llamadnos una vez al día. -Heather otra vez.

Mamá eso es carísimo! -se quejó Elle.

-Adios, primo favorito. -dijo Alex abrazando a Ian.

-Soy tu único primo. -dijo Ian mientras abrazaba a su prima.

-Pues eso mismo, mi favorito. -todos rieron y abrazaron a las viajeras. Las dejaron solas y ellas miraron el aeropuerto.

-¿Y ahora que? -preguntó Elle.

-No sé, el papeleo siempre lo hacía mi padre. -dijo Alex.

-Allá pone Barcelona. -dijo señalando una pantalla.

-Pues vamos a facturar.


Cogieron cada una un carro de maletas donde descansaban sus maletas y se acercaron a facturar. Cuando estuvieron listas se sentaron a esperar que el viaje de sus vidas empezara.

3 comentarios: