38.-

-Chicos os estábamos buscando. -dijo Gregg, cuando encontró a Olivia y a Sebastian disfrutando de un concierto.- ¿Dónde tenéis los teléfonos?

-Por allí. -dijo Sebastian, señalando sus tiendas en la distancia.

-Bueno, que Pauline y Nancy van a cocinar y quieren saber si os da igual el qué comer. -dijo Greggory.

-A mi me no importa. -dijo Olivia.

Sebastian asintió, compartiendo la misma opinión. Los dos se quedaron escuchando la música del concierto, uno al lado del otro. Hasta que alguien tocó la espalda de Olivia. Era Asutin. Ella se levantó apurada y Sebastian hizo lo mismo.

-Hola. -dijo con una sonrisa Olivia.

-Hola, Liv. ¿Cómo estás?

-Bien, hacía un montón que no te veía. -dijo Olivia, sorprendida.- ¿Qué haces aquí? -Austin cogió aliento y lo soltó lentamente. Con eso hizo que Olivia casi le pudiera leer la mente.- No, por favor, no me digas que viniste a buscar a India.

-Sí, Olivia, quiero volver con ella. -dijo Austin, poniéndose serio. La sonrisa de Olivia se borró de inmediato.

-¿Cómo tienes la cara de venir, Austin? -dijo Olivia, muy seria. Entonces Michelle apareció en la escena.

-¿Austin? -preguntó ella. Se acercó y él le sonrió.- ¿Qué haces aquí? -dijo sonriente y emocionada.

-Vino a buscar a India. -dijo Sebastian.

-¿A India? -preguntó Michelle. Vio la cara seria de Olivia y miró fijamente a Austin.- ¿Estarás de broma? ¡La dejaste y ahora quieres volver!

-Fue un error. Me di cuenta de que me importa más de lo que yo pensaba. -dijo Austin.

-Pero ella lo sabía desde el principio y tú no tuviste los huevos de enfrentarte a los problemas. -dijo Olivia. Sebastian puso una mano sobre su hombro para que se tranquilizara.

-No puedes venir ahora. Está con Nick. Y están muy bien. -dijo Michelle.

-Pero estoy enamorado de ella y ella de mi. -dijo Austin.

-Está con Nick. -repitió Michelle.

-No le hagas esto, Austin. -pidió Olivia.

-¿Qué quieres que haga sino? La quiero, Olivia. Me equivoqué, todo el mundo se equivoca. Y ahora lo quiero arreglar, todo. Hablaré con sus padres, me enfrentaré a ellos. -dijo Austin. Olivia negó con la cabeza.

-Ahora no sirve de nada. -dijo Olivia.

-¿Sabes lo mal que lo pasó India cuando la dejaste? -le dijo Michelle, más agresiva que Olivia.- ¡Le llamaste niñata!

-No le llamé eso. Le pedí que afrontara eso como una adulta. -dijo Austin.

-Pues eso hizo, lo superó. -dijo Sebastian.

-Sebastian... -pidió Austin.

-Sebastian nada. Tiene razón. Lo superó y ahora está bien con Nick. -dijo Michelle.- No intentes hablar con ella.

-¿Me lo estáis prohibiendo? -preguntó Austin, cruzando los brazos por delante de su pecho.

-No, pero por algo me buscaste antes de ir a hablar con ella. Austin, si viniste a hablar conmigo escúchame. -le dijo Olivia, acercándose un poco más a él.- Está bien con Nick. Supéralo tu también.

Olivia, Michelle y Sebastian se alejaron de Austin, sin mirarlo. Los tres volvieron a donde estaban las tiendas. Como estaba haciéndose de noche todos estaban preparando las cosas para dormir. Pauline y Nancy habían ido a comprar la cena. Algunos preparaban una pequeña hoguera. Otros se habían ido a duchar... Todos se volvieron a reunir para cenar, alrededor de un pequeño fuego.

-Chicos, mirad lo que compré. -dijo India. Sacó de su mochila una bolsa de nubes. Todos se rieron.

-¿También quieres que contemos historias de miedo? -bromeó Kevin.

-Pues a mi me gustan. -dijo India, acercando una al fuego.

Algunos se quedaron y otros se fueron yendo a sus tiendas. Pero los trasnochadores se quedaron alrededor de Cory y su guitarra.

-¿Qué queréis cantar? -preguntó Cory.

-Que cante Liv. -pidió Becca. Su amiga la miró con una ceja más alta que la otra y todos se rieron.

-Venga, va, Liv. Tú cantas una y después cantamos todos juntos. -pidió Gregg. Olivia suspiró y asintió.

-¿Cuál? -le preguntó Cory. Olivia se fue a sentar a su lado y pensó.

-Wake me up, de Aviici. -dijo Olivia. Cory asintió.- I tried carrying the weight of the world, but I only have two hands. I hope I get the chance to travel the world. And I don't have any plans. I wish that I could stay forever this young. Not afraid to close my eyes. Life's a game made for everyone. And love is a prize.

Becca les hizo una seña a todos, diciendo que en el estribillo cantaran todos juntos. Todos asintieron y sonrieron.

-So wake me up when it's all over. When i'm wiser and i'm older. All this time I was finding myself and I... Ididn't know I was lost. -cantaron todos coordinados.

Algunas personas que pasaban se quedaban mirándolos, pero ellos solo sonreían y cantaban. Cantaron alguna canción más, todos juntos. Sebastian y Greggory volvieron de dar un paseo y sonrieron al verlos.

-Sebastian... -dijo Cara, antes de que su hermano y su amigo se sentaran con el resto.- Hola, Gregg.

-Hola, Cara. -dijo Greggory, antes de sentarse con el resto y dejar a los hermanos solos.

-Quería venir a darte las buenas noches. -dijo Cara. Sebastian metió las manos en los bolsillos y asintió.

-¿Estáis muy lejos? -preguntó Sebastian.

-No, muy cerca de aquellos baños. -dijo Cara, señalándolos. Sebastian volvió a asentir.

-Buenas noches, Cara. -dijo Sebastian, antes de sentarse con el resto.

Había sido una situación incómoda y Sebastian estaba triste por ello, ya que nunca estuvo incómodo con su propia hermana. No tardaron en irse a dormir. Cada uno a su tienda.

-¿Por qué no me preguntaste sobre lo de mi adopción? -le preguntó Sebastian a Olivia, cuando ambos estaban acostados en la tienda.

-No es asunto mío, Sebastian. Supongo que no lo querrás hablar y no te voy a obligar a hacerlo. -dijo Olivia, mirándolo.

-Siento no habértelo contado. No me gusta el tema. -dijo Sebastian.

-Ya te dije que no es asunto mío. Y no me importa.

-¿Sabías que la madre de Cara siempre quiso estar en contacto con ella? -le dijo Sebastian. Olivia lo volvió a mirar, sorprendida.- Su adopción no fue cerrada. Ella era una chica de dieciséis años y la conocíamos desde que éramos pequeños. Era nuestra niñera algunos días. Pero, cuando yo tenía quince años y Cara catorce nuestros padres decidieron contarnos quien era. Nosotros ya sabíamos desde pequeños que éramos adoptados, pero lo de que Maggie fuera la madre de Cara le sentó muy mal a ella. Cara exigió dejar de verla, no quería saber nada de ella. Maggie dejó de vernos y estaba tan triste... Pero yo de vez en cuando quedo con ella y le cuento sobre Cara.

Olivia se había sentado con las piernas cruzadas y tenía una sonrisa de lado.

-Eso está bien. Algún día seguro que Cara querrá volverla a ver. -dijo Olivia. Sebastian asintió.

-Por eso me enfado tanto con ella a veces. Porque no entiendo como puede desperdiciar cosas así. Por eso me sienta tan mal que ni siquiera haga el esfuerzo de llevarse bien contigo...

-No te preocupes. Ya te lo dije más veces. Seguro que algún día hará el esfuerzo. -dijo Olivia. Los dos se sonrieron y se fueron a dormir.