-¡Gracias
por no esperarnos! -se quejó Elle llegando a la playa de la mano de
Damien.
-No
tenía ganas de escuchar más sonidos tan desagradables. -le contestó
Alexis.
-¿Se
nos escucha? -preguntó en voz baja Elle, dejando fuera a Damien.
-¡Que
asco, Elle! -Alexis dejó su toalla en la arena y se fue corriendo al
agua. El amigo de Damien, Sammuel Anderson, miró como se iba
corriendo.
-Ni
se te ocurra. -lo amenazó Damien levantando su dedo índice.
-Sólo
se vive una vez. -dijo Sam antes de ir detrás de Alex.
-Lo
siento. -le dijo Damien a Elle.
-Da
igual, que se las arregle sola. -se acercó a él y lo besó.
Pasaron
casi toda la mañana juntos, en el agua, nadando, paseando en la
arena... Alexis pasó toda la mañana intentando escaparse de Sam,
pero no lo consiguió.
-Alex,
vamos a comer. -le dijo Damien que rodeaba a su prima por los
hombros.
-Os
acompaño. -se levantó rápidamente y cogió su bolso.
-Yo
también. -dijo Sam imitándola, pero Damien lo paró con una mano en
su pecho.
-Es
mejor que nos dejes solos, amigo.
-Gracias...
-musitó Alexis mirando el cielo.
-¿Nos
vemos en la fiesta? -les preguntó Sam.
-¿Que
fiesta? -preguntó Elle.
-La
fiesta de despedida del verano. Estamos a mediados de agosto y ya
queda menos para que la mayoría de nosotros volvamos a nuestras
casas. En invierno esto está lleno de viejos y es un muermo.
-explicó Damien.
-Allí
estaremos. -dijo Elle.
-¿Cómo?
Ellie, nos vamos en dos días. -la avisó su prima.
-Por
eso, divirtámonos. -las dos se rieron y los amigos se miraron sin
entender el humor de las Stuart.
-Está
bien... -dijo Alex todavía riéndose. Pero su teléfono empezó a
sonar y al leer el nombre del autor de la llamada se puso nerviosa.-
Emm.. Ahora voy, chicos. Un momento. -se separó del grupo y cogió
el teléfono.
-Es
Andrew. -Elle informó a los chicos.
-¿Quien
es ese? -preguntó Sam. Elle pasó la mano por la cara de Sammuel y
suspiró.
Elle,
Damien y Alexis comieron entre risas en un pequeño bar sobre la
playa.
-Entonces,
¿os vais pasadomañana? -preguntó Damien.
-Si.
-dijo sonriente Alexis.
-¿Cuando
me lo ibas a contar? -le preguntó Damien a Elle.
-Yo
voy al baño... -dijo bajando las piernas de la silla e yéndose a
los baños del bar.
-¿Cuando
me lo ibas a decir? -él formuló de nuevo la pregunta.
-Damien,
yo pensaba...
-¿Pensabas
irte sin decir nada?
-No,
no, no... -dijo atropelladamente.- Yo quería hablar antes con Alex,
pero creo que ella no tendrá problemas con que nos acompañes...
-¿Que?
-¿Quieres
acompañarnos en nuestro viaje?
-Elle,
yo... -ella esperaba una respuesta positiva, pero él no sabía cual
era la respuesta correcta.- Yo tengo toda mi vida en Boston y no
puedo dejarlo todo así sin más... Además, vosotras ni siquiera
sabéis cuales son los lugares que vais a visitar... -ella bajó la
vista.- Tienes que entenderme...
-Si,
si claro... Además me acabas de conocer y...
-No
es por eso. Te lo juro.
-Lo
entiendo, lo entiendo... Pero no nos pongamos melancólicos. Hoy
vamos a divertirnos en la fiesta y mañana que pase lo que tenga que
pasar...
Damien
sonrió y los dos se besaron. Pero, Alex llegó. Primero esperó un
poco a ver si se separaban, luego se sentó y al ver que no se
separaban, carraspeó un poco.
-¿Hola?
Estoy aquí... -canturreó. Los chicos se separaron y rieron de la
cara de Alexis.- No le veo la gracia.
-Eso,
es porque no te ves la cara. -dijo riendo Damien.- Bueno, os dejo
prepararos. Supongo que tendréis mucho que hacer. Os espero en la
fiesta.
Se
fue y les guiñó un ojo. Las primas volvieron al hotel y se echaron
un rato en la cama. En realidad, Alexis durmió -es de aquellas
chicas que necesitan dormir doce horas diarias-, y Elle se puso a
pensar en cómo sería el resto del viaje en la situación de su
prima -se había enamorado de un hombre que no volvería a ver-.
Después se dio cuenta de que Alexis llevaba casi un mes sin ver a
Andrew y decidió que ella era la mejor para un consejo. Corrió a la
habitación de su prima y la despertó.
-¿Que
quieres pesada? -preguntó con voz dormida Alexis.
-Alex,
necesito un consejo. -dijo moviendo a su prima para que se despertase
del todo.
-Pues
llama a Heather -recordemos, la madre de Elle.-, y deja de
molestarme.
-Mi
madre no puede aconsejarme esta vez. -Heather era la principal dueña
de los consejos a su hija.
-¿Que
pasa? -dijo abriendo un ojo.
-Le
pedí a Damien que nos acompañara el resto del viaje y me dijo que
no.
-¿Tú
eres tonta? -ahora ya estaba despierta.
-¿Por
que?
-Esta
conversación ya la tuvimos hace poco, Elle. Para ti todo es amor y
todo es jugarse la vida por lo que piensas. Pero no es así. Damien
es una aventura que viviste en Kea y que dentro de unos años te
reirás por pensar que era el gran amor de tu vida.
-¿Eso
piensas? -su prima asintió totalmente, seria.- ¿Y Andrew?
-Andrew...
-pensó bien la palabras que iba a decir.- Fue un beso, Ellie.
-Pero
tú lo quieres ¿no?
-Querer
es una palabra muy grande... -excusa típica de Alexis Stuart.
-¿Sabes
que es lo que pienso? -dijo Elle, Alexis negó con la cabeza.- Que
todo esto lo dices para ocultar, porque te enamoraste de Andy y
porque tienes miedo.
-¿Miedo
a que?
-A
no volverlo a ver. Y te arrepientes de no haberle dicho que viniera
con nosotras. Y espero que nuestro siguiente destino te haga cambiar
de opinión.
-¿Por
qué? ¿Que tiene de especial nuestro siguiente destino?
-Nuestro
siguiente destino es París, la ciudad del amor...

Más novee!!!!
ResponderEliminarQuiero más :)
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