lunes, 4 de noviembre de 2013

Confesiones.




-Chicas, vamos, tenéis que apurar o llegaremos tarde. -las avisó Jane mientras desayunaban.

-¿Contra quién jugamos hoy? -preguntó Mona.

-Contra las campeonas de Francia, ASVEL Lyon-Villeurbanne. -dijo leyendo su carpeta roja.- Vamos, en diez minutos todas al autobús.

-¿Nosotros podemos ir? -preguntó Noel. Que era uno de los pocos chicos que estaban desayunando con las chicas, el resto seguía durmiendo.

-Los que quieran venir que vengan. -dijo Goldman leyendo el periódico.

-Voy a avisar a Eric, él si que tiene que venir. -dijo Jane levantándose de la mesa.

Las chicas subieron al autobús y Charlie, Noel y William también fueron, aparte del equipo técnico (Goldman, Jane y Eric). Tuvieron que aguantar una hora de viaje en bus. Esa hora la aprovecharon para motivarse, dormir o hablar. En cuanto llegaron, las chicas fueron a vestirse al vestuario, los chicos a las gradas y Goldman, Jane y Eric prepararon los papeles para jugar. El partido fue difícil, muy difícil, acabando siete puntos por debajo de las francesas. Pese a la derrota, las chicas se fueron contentas al hotel. Había sido un gran partido y, el simple hecho de estar allí, ya era una victoria. Cuando llegaron al hotel los chicos las estaban esperando para comer.

-¿Cómo os fue? -preguntó Paul.

-Perdimos de siete. -dijo Alice con una sonrisa en la cara.

-Pero jugamos bien. -añadió Patty.

-Y yo me muero de hambre. -dijo Cassandra sentándose en la primera silla que encontró.

-Ya os van a traer la comida. -dijo Goldman.- En cuatro horas nos vamos al partido de los chicos. -avisó.- Chicas, ¿vosotras vais a ir?

-No. -dijo a coro casi todas las mujeres.

-¿Por qué no? -preguntó Sheldon sorprendido.

-¿Tú fuiste a mi partido? -le preguntó Margarett. Sheldon negó.- Entonces, ¿por qué voy a ir yo a tu partido?

-Pero yo si fui, Maggie. -dijo Noel.

-Tú fuiste a ver a Mery. -dijo Jamie.

-Yo también fui, chicas. -dijo William.

-Tú fuiste a ver a Brianna. -dijo Sarah. Entonces, todos miraron a Charlie esperando que él se uniera a la conversación, pero él no dijo nada por miedo a que lo acusaran.

-Ya viene la comida. -les dijo una mujer que trabajaba en el hotel. Una serie de mujeres y hombres empezaron a servir el primer plato. Las chicas comieron como si no lo hubieran hecho desde tres días atrás.

-¿Contra quién jugamos hoy? -preguntó Peter, mientras esperaban por el segundo plato.

-Italianos, Montepaschi Siena. -informó Goldman.

-Si son italianos yo voy. -dijo rápidamente Lilly. Todos rieron de la reacción de Lilly.

El partido de los chicos también fue difícil, pero ellos ganaron por tan solo dos puntos. Lilly había convencido a todas las chicas para ir a ver el partido de los chicos. Cuando llegaron todavía quedaba un rato para la cena, por eso Goldman dejó que sus chicos hicieran lo que quisieran. Cuando Kayla caminaba hacia su habitación, se tropezó con Cassandra, Ryan y Alice, que iban en bañador.

-¿A dónde vais así? -preguntó Kayla.

-A la piscina interior. ¿Vienes? -le propuso Cassandra.

-No, voy a descansar. Estoy un poco agotada... -dijo masajeándose el cuello.

-Vale, tú tranquila. -dijo Cassandra acariciándole un brazo. Los tres siguieron su camino y Kayla se fue a su habitación.

La semana transcurrió entre victorias y derrotas por parte de los dos equipos. El jueves, como Harry Goldman había prometido, visitaron Disneyland París. El equipo de las chicas llegó a las semifinales y después luchó por el tercer puesto, el cual ganaron. En cambio los chicos quedaron en quinta posición. En el último partido de los chicos, las chicas utilizaron los uniformes de animadoras y los deleitaron con una pequeña coreografía hecha por Sarah con Girlfriend de Avril Lavigne de fondo. Pero el sábado llegó y con ello la hora de hacer las maletas. Ya tenían todo listo, solo quedaba esperar a que las seis de la tarde llegaran para que un autobús los llevara hasta el aeropuerto. Por eso aprovecharon para reunirse todos en la azotea y sentarse juntos.

-Se acabó. -dijo finalmente Peter.- Ya volvemos a casa.

-Y dentro de una semana os graduaréis. -dijo Tyrone, que, como Cassandra, Ted, Patty y Leo, era un año menor que el resto de su equipo.

-Dentro de una semana nos graduamos... -repitió Brianna, como en estado de shock.- Ya que estamos todos juntos, os quiero decir que me aceptaron en Oxford.

-¿Qué? -preguntó sorprendida Cassandra. Brianna asintió y todos la felicitaron.

-Yo me voy a Boston. -dijo Brandon.

-Yo también. -añadió Eric.

-Y yo. -dijo Kayla.

Uno a uno fueron desvelando sus futuros destinos. Algunos se quedaban y otros viajaban lejos, como Brianna y Charlie.

-¿Cuando jugará Cornell contra Duendes Verdes? -le preguntó Noel a William, ya que su amigo viajará a Ithaca mientras Noel se quedará en Bugle y seguirá jugando en Duendes Verdes.

-El seis de diciembre a las nueve de la noche. -dijo William. Todos rieron sobre la información que estaba dando Will con seis meses de anteración.

-Chicos, os he buscado por todos lados. El bus ya está esperándonos. -dijo Jane, desde la puerta de la azotea.

Los chicos cogieron sus cosas y las subieron al autobús. Se sentaron en el bus, preparados para aguantar una hora y media de autobús, dos horas en el aeropuerto, ocho horas a Nueva York y una hora y media a Bugle. Llegarían el domingo por la tarde. Brianna y William aprovecharon para dormir en el autobús, uno encima del otro. Ryan y Cassandra escucharon música todo el camino, mientras ambos se mensajeaban con sus parejas. Mery y Noel, durmieron un poco y después hablaron. Kayla durmió en el hombro de Brandon, mientras él llamaba a su novia.

Los viajes en el avión fueron largos, pero amenos. Se cambiaban de sitios continuamente y hablaban todos con todos. La charla que tuvieron en la azotea los había echo pensar en lo que iba a ser de ellos durante el siguiente año. William aprovechó para grabar las últimas escenas del viaje con su cámara.


En cuanto llegaron sus familias los recibieron con los brazos abiertos. Adam y Heather estaban acompañados por Roxanne -la madre de los mellizos- que se unió a ellos en la cena. Heather y Molly habían aprovechado la ausencia de los chicos para mudarse a casa de los Evans, por eso, esa noche Brianna durmió por primera vez en su nuevo cuarto, con Molly. El día siguiente iba a ser duro, la vuelta al instituto y la preparación para la graduación y el baile.

¡SOLO QUEDAN NUEVE CAPÍTULOS!
Espero que les disfrutéis y que os haya gustado.
PD: Para aquellos preocupados, sí hay una segunda temporada de Cazadores de Duendes.
Un beso.
Cris.~

5 comentarios:

  1. Me encanta, me la leí entera hoy, síguela pronto, please!!! Eres muy buena en esto, no has pensado nunca en ser escritora!!!! Tienes una fan tuya desde España!!!!

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  2. Más!!! es genial tu novela.

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  3. Holaaa me acabo de leer tu nove y me encantaa espero q sigas escribiendo asi por mucho tiempo.

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