Diez: LA ACTUACIÓN.

En la cena los ocho, no nos olvidemos de Mayte, trancurrió entre la bromas de Lali y Nico y las risas de los demás.

-Bueno, aun no nos dijiste para que viniste, mamá. -dijo Nicolás.

-Vine porque mañana me enteré de que Gas cantaba con el grupo teatral y vamos a ir todos a verlo.

Lali al escuchar estó se paró y se fue. Mayte la miró irse sorprendida y Roberto miró a su ex mujer.

-¿Que le pasó? -preguntó Mayte.

-¿¡Como que que le pasó, Mayte!? -gritó Roberto.

-No me grites. -dijo esta tranquila.

-¡La semana pasada le prometiste que ibas a ir a verla jugar, no fuíste y ahora le decís que vienes a ver a su hermano! -ahora ya estaba parado muy enojado.

-Pero tengo más obligación de ir a ver a mi hijo de verdad. -dijo gritando también Mayte. Ahora el que se levantó fue Nicolás acompañado de Gastón.

-¿Sos estúpida? -le gritó Nicolás.

-No me insultes. -le dijo Mayte.

-Tiene razón. -lo apoyó Gastón.- Lali es tan hija tuya, como yo o Nicolás. -sin pensarlo le hizo una seña a Rochi y Peter para que subieran. Los dos le hicieron caso y subieron las escaleras.

-No es verdad. Mariana no comparte sangre con nosotros. ¿Que es lo que no entienden? No puedo tratarla como si fuera mi hija, porque no lo es.

-Ahora ya entiendo porque vivimos con papá. -dijo Nicolás.- Porque el no distingue eso. Y si Lali no comparte sangre con nosotros no se nota. Nadie lo sabe. Y la acabas de humillar delante de Peter y Rocío. Sos de cuarta.

-Y mejor mañana no vengas a verme. -dijo Gastón. Los dos subieron las escaleras también. Entonces vieron a Peter y Rocío en la puerta del baño.- ¿Está ahí? -preguntó Gastón. Los dos hermanos asintieron. Nicolás golpeó la puerta del baño.

-Lali. Abrime. -dijo Nico.

-Lali, por favor. -dijo Peter.

-¡Dejenme sola! -gritó desde dentro Lali.- Utilicen el baño de abajo porque no salgo de acá hasta que me muera de hambre.

-Dejá de decir tonterías y abrime, Lali. -dijo Gastón.

-Apartanse. -dijo Nicolás. Entonces empezó a golpear la puerta con el hombro hasta que se abrió y todos entraron corriendo. Entonces vieron a Lali sentada en el suelo, tenía la cabeza entre sus piernas.

Todos se acercaron y la abrazaron. Lali se aferró al brazo de Peter y empezó a llorar aun más fuerte.

-Dale, parate. -dijo Rocío agarrandole de un brazo tirondeando de ella. Mientras la petiza negaba. Peter la agarró de la cintura desde un lado, y con la ayuda de Nico la pararon. Ella se aferró a la remera de Peter. La acompañaron a su cuarto y se sentaron en las camas de las dos hermanas.

-Tranquila... -decía su hermano, Gastón.- ¿Escuchaste todo lo que dijo?

-Estaba gritandolo. -dijo Lali entre sollozos.

-Pero no le tenés que hacer caso. -dijo Nicolás.

-Eso, vos tenés que pensar que la única que piensa así es ella. Los demás no. -intervino Rocío.

-Pero ella es mi mamá. -dijo Lali con la voz ahogada.

-Tranquila. -dijo Peter. Después de un tiempo intentando consolar a la petiza decidieron dejarla sola con Rocío. Los tres hombres fueron a su cuarto y se acostaron cada uno en su cama.

-Che, Peter. ¿Te pasó algo con mi hermana? -dijo Gastón.

-Si, les voy a contar. -dijo sentándose.- Pasa que antes, cuando estábamos acá, besándonos, mi soldadito...

-¿Se puso firme? -dijo Nicolás riéndose. Peter asintió y los rubios se empezaron a reir.

A la mañana siguiente. Julia entró al cuarto de los hombres y los despertó, y después fue al cuarto de las mujeres. Los chicos y Rochi se pararon, en cambio Lali se quedó en la cama. Peter al verla aun en la cama se acercó y se acostó a su lado. Le empezó a besar el cuello. Lali a sentir unos labios en su cuello se asustó y lo miró.

-¿Peter? -dijo casi inaudible.

-Buen día, mi amor. -dijo intentando besarle en la boca.

-Peter, está tu mamá y mi papá por acá. -dijo la petiza. Se paró y fue al baño. Peter suspiró y se quedó en la cama de la petiza hasta que se dió cuenta de que iba a llegar tarde.

En la escuela no intercambiaron palabras ni durante la comida. Lali, Rochi y Gas no fueron a entrenar debido a que debían prepararse para la actuación a la cual todo el equipo iba a ir. A falta de menos de treinta minutos para empezar el teatro estaba totalmente lleno. Estaban Roberto y Julia también aunque ellos todavía no sabían que sus dos hijas también cantaban, ellos estaban allá por Gastón.

-Estoy re nerviosa... -le dijo Lali a Rochi, Mimi y Teté.

-Yo también. -dijo Mimi.

-¿Con cual empezamos? -preguntó asustada Rochi.

-Empieza Gastón con su solo. -dijo Teté, que era la más tranquila.

-¡Chicos, todos a sus puestos! -gritó Julia, y todos corrieron a su sitio.

El pánico las inundó. Las dos se miraron y se abrazaron.

-¿Estás lista? -dijo la rubia.

-No. ¿vos? -dijo Lali.

-No, pero hay que hacerlo.

El sonido de la guitarra de Gastón sonó y su maravillosa voz empezó a cantar I'm yours de Jason Mraz.

-Ese es mi hermano. -le dijo Nicolás a Eugenia que estaba a su lado.

-Ya lo se, tonto. -dijo la rubia.

-I'm yours... -cantaba Candela al son de su amigo. Hasta que Victorio y Agustín decidieron actuar al mismo tiempo y los dos le taparon la boca.

Al acabar la canción Mimi se unió con él en el escenario.

-Buenas tardes y bienvenidos un año más a la presentación del grupo de teatro. -dijo la rubia pelicorta.

-Este año nuestros componientes son: Lucía, Raquel, Eva, Teté... -dijo el joven Riera.

-Coco, Lucas, Diego, Jose, Marcos, Raul... -al tiempo que los rubios los iba nombrando entraban al escenario.

-Y por último, este año entraron nuestros dos nuevos ángeles. Ellas van a interpretar un dúo. -y Gastón iba a presentar a sus hermanas. Lali y Rochi entraron al escenario sonriendo.- Chicas, ¿que van a cantar? -les preguntó el rubio.

-Nosotras vamos a cantar un tema de Adele. -explicó Rocío.

-Someone like you. -dijo Lali. El resto de grupo de teatro salió del escenario salieron y las dos se pusieron a cantar.

-¿Que hacen ellas acá? -le dijo Julia a Roberto.

-Cantar... -dijo el que estaba estupefacto.

-¿Desde cuando cantan?

-No se, pero lo hacen re bien...

Los aplausos iban a ritmo de la canción de las dos mujeres y los que más fuerte aplaudían eran Peter, Julia, Roberto, Nicolás, Eugenia, Pablo y Candela.

-Esas son mi hermana y mi novia. -decía Peter todo el tiempo.

El escenario vibró cuando las dos chicas acabaron la canción. Pero lo que nade se esperaba es que en la puerta del teatro estaba Mayte observándolas. El público estaba de pie alavándolas y ellas estaban abrazadas en el centro del escenario.

-¡Ahhhhh! -Rochi salió corriendo hacia su hermano cuando lo vió. Y Lali y Gas hicieron lo mismo con Nicolás.

-Son unas grosas. -dijo Nico.- Y vos, sos el mejor. -esto iba dirigido a su hermano.

-¿Vieron las caras de mamá y de Roberto? -dijo Peter.

-Si, espero que no se enojen.. -dijo Rochi.

-¿Como se van a enojar si son unas grosas mal? -dijo Gastón. Los cinco se abrazaron y Nicolás y Peter ayudaron a sus hermanas a llevar algunas cosas de vestuario y todo eso a casa. Cuando entraron en casa Julia y Roberto se abalanzaron hacia los tres músicos felicitándolos.

-Dos de mis tres hijos hoy la rompieron. -dijo Roberto abrazando a Gas y a Lali.- Nico, Peter, ¿porque no se copan ustedes también a lo de cantar?

-Eso mejor se lo dejamos a ellos. -dijo Peter que abrazaba por los hombros a Rochi y a Julia.

El timbre de la casa sonó. Los siete miraron hacia la puerta y Lali la abrió.

-Hola, hija. -le dijo Mayte. Ella sin más subió las escaleras.- Pero, Lali.

-Mayte, por favor... -pidió Roberto.

-Necesito hablar con mi hija, que las vi cantar y son geniales... -dijo mirando a Rocío.

-¿Ahora es tu hija? -le preguntó Nicolás.

-No me hables así. Soy tu madre.

-Lo sabemos, mamá. Pero ayer te pasaste con la pequeña. -dijo Gastón