9. Oficialmente
parte del equipo.
-Chicos quien falta? -preguntó Guido esperando en una
placita para ir a cenar con sus compañeros de equipo.
-Faltan León y Juan que primero van a buscar a Abril y
después vienen. -explicó Alan.
-Ya estamos acá! -gritó Leon cuando llegó en compañía
de Juan y Abril.
Todos comenzaron a andar hacia un burguer hablando de
diversos temas. Mientras Abril caminaba al lado de sus mejores
amigos, Leon y Juan, sin intervenir en la conversación.
-Podés hablar, enana. -le dijo Juan.
-No me llames enana. Y que querés que diga si no
entiendo de lo que están hablando.
-Estamos hablando sobre el equipo contra el que nos toca
jugar el fin de semana que viene. -le explicó León.
-Ah... no me interesa. No creo que mi papá me deje
jugar...
-Pero vos querés jugar ¿no? -preguntó Juan.
-Si, pero mi papá no quiere que yo juegue. Y menos con
ustedes...
-Por que? -preguntó León.- Además, si ya tenés ficha
técnica tenés que jugar.
-Pero no tiene que ver. Ni mi papá, ni mi Tío Peter
quieren que juegue, y si ellos no quieren no voy a jugar...
-Revélate! -si, eso fue una orden de Juan.- Si querés
jugar, vas a jugar! El lunes le preguntamos al mister, si dice que
no, no entramos. Y si dice que si... tampoco!
-Lo que a ti te pasa es que no querés entrenar... -lo
acusó León.- Pero me parece buena idea!
-Chicos, no hace falta que se la jueguen por mi...
-Aquí es! -gritó Guido parado delante de un burguer
señalando. Todos rieron e ingresaron a cenar como un equipo.
-Bueno, yo creo que a Abril la tenemos que bautizar como
OFICIALMENTE PARTE DEL EQUIPO... -dijo Alan en el momento en el cual
esperaban la comida.
-Tenemos que hacer el juramento.
-Que decís Juan? Que juramento? -preguntó la única
mujer entre los varones.
-No pensarás ser parte del equipo
sin hacer ningún juramento!? -se escaldalizó León.
-Deberás jurar que: 1.Tendrás
que venir a entrenar todos los días. 2. Tendrás comprarte el
jogging del equipo y ponertelo todos los días que tengamos partido,
todo el día. 3. Aun que tu papá no te deje, vos vas a intentar
jugar como lo hacemos todos nosotros. Y 4. Cuando acabemos los
partidos, después de bañarte, tendrás que asistir al tercer
tiempo... -dijo Alan con una mano en el corazón, al igual que había
echo el resto del equipo mientras el hablaba.
-Lo juro. -respondió aguantando
la risa, Abril, con una mano en el corazón.
-No es joda, enana. -le recriminó
Juan.
-Guardáte lo de enana, Juan. O
voy a tener que llamarte por tu segundo nombre?
Juan le tapó la boca corriendo.
-Shh... las mejores amigas no
deben decir cosas que no se deben decir... -dijo este aun tapandole
la boca.
-Chicos, ya son las doce y media.
Yo me tengo que ir. -anunció Guido.
-Yo tambien, estoy en penitencia
desde que suspendí historia. -suspiró Andrés.- Suerte que me
escapé un ratito gracias a mi hermana mayor.
-Yo tengo que volver, que mi papá
me dijo que volviera antes de la una. -se quejó Abril.
-Che... re capo tu papá.... -dijo
Lucas.
-No mientas, es tu coatch y es re
duro con ustedes.
-Tampoco es tan duro... -dijo
Santiago alargando la "a".- Solamente que no le gusta
perder ni al parchís...
-Dale, acompañamos a la nena para
hacer buena letra con el mister? -propuso Aitor. Y así todos
salieron del burguer hacia la casa de Abril.
Cuando llegaron al portal de esta
se encontraron con Pablo sentado en este y fumando un cigarro.
-Que hace tu papá ahí? -le
preguntó Alan entre susurros a Abril.
-No se, ni tampoco se que hace
fumando. Pensé que lo había dejado... -cuando ya estaban delante de
su papá, este se paró.- Hola, papi!
-Hola chicos. La pasaron bien?
-Si, mister. -contestó Juan.
-Nosotros nos vamos que nos
esperan en casa... -todos saludaron a Abril con un beso en la mejilla
y esta con su papá entró al portal despues de que el tirara el
cigarro.
-Papá, que hacías vos fumando?
-preguntó Abril cuando estaban los dos en el elevador de su
edificio.- Pensé que lo habías dejado cuando nació Joaquín...
-Yo también, pero te estaba
esprando abajo y me entraron ganas... Pero no se lo digas a tu
mamá... -dijo estirando su dedo indice.- Queda entre nosotros eh!
-Dale, pero no tenías porque
esperarme abajo. Tengo llaves papá...
-Pero tenía que asegurarme de que
tus amiguitos te cuidasen bien.
Ya estaban delante de la puerta de
casa, Pablo abrió la puerta y los dos rieron cuando vieron a Rocío
dormida en el living con la TV encendida en el canal de cocina.
-Andá a dormir ya llevo yo a tu
madre a la cama. -le dió un beso en la cabeza y Abril se fue a su
cuarto. Despues de ese día debía descansar. El día siguiente
entrenaría con su papá.
Parece k Pablo pensaba k estaría más k cansada.Los chicos la acompañarón ,ya dije,sobreprotectores.
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