48.-

El buen tiempo llegó a Bezos. Pero también llegaba la época de exámenes, la época de trasnochar... Y los alumnos empezaban a notar el cansancio sobre sus huesos. Antes del recreo, Sebastian y Olivia tenían clase de Literatura. Se sentaron uno al lado del otro, como era habitual.

Olivia llegó primero y se sentó en su sitio, apoyó la cabeza en la mesa, la rodeó con sus brazos y respiró tranquilamente. Cuando Sebastian llegó y la vio se rió. Se acercó a ella y se sentó a su lado, poniendo una mano en su espalda. Olivia giró la cabeza, pero no la levantó, para mirarlo. Le sonrió y él le dio un beso.

Los alumnos llegaron y se sentaron en silencio. Algunos ya dormían sobre las mesas, otros aprovechaban cada segundo para estudiar y otros hablaban entre ellos. El profesor no llegaba y, después de unos minutos Bryan se levantó con los brazos en alto y gritó.

-¡Pasaron quince minutos, chicos! Vámonos. -dijo Bryan.

Si el profesor faltaba más de quince minutos significaba que no iría a clase. Todos se levantaron con sus cosas y se fueron dispersando. Mientras que los más aplicados iban a la biblioteca a estudiar, otros, como Sebastian y Olivia, se fueron al patio a descansar.

Salieron y se sentaron en un pequeño jardín donde el sol iluminaba. Sebastian y Olivia se sentaron contra un muro. Olivia se apoyó sobre Sebastian y los dos se pusieron a dormir. Olivia sintió a dos personas correr a su lado y se despertó. Entonces cogió su móvil y sus cascos de su bolso y se puso a escuchar música.

El piano empezó a sonar, era una canción muy famosa en una versión poco famosa. Era Girls just wanna have fun, pero en una versión acústica. Era una de las canciones favoritas de Olivia, con ella sentía que podía hacer lo que quisiera, que todo iba a ir bien. Esa canción la relajaba. Sobre todo una parte, había una parte que le encantaba: Some boys take a beautiful girl, and hide her away from the rest of the world. I want to be the one to walk in the sun.

Al cantarla en voz alta, Marlene, que salía al recreo con Cara, se paró delante de ella, tapándole el sol.

-¡Ei! Estaba tomando el sol... -se quejó Olivia, abriendo los ojos. Al ver a Marlene y a Cara sonrió.- Chicas, ¿qué hacéis aquí? ¿No tenéis que estar en clase?

-Estamos en el recreo. -dijo Cara, casi riendo.

-¿Ya? -preguntó Olivia, sorprendida y mirando el reloj del móvil.- Jo... Sebastian... -dijo moviéndolo. Su novio se despertó alarmado y miró a todos lados.

-¿Qué pasa? -preguntó él.

-Que ya estamos en el recreo... -dijo Olivia.

-Mierda, tengo reunión con el equipo de soccer. -dijo Sebastian, levantándose. Le dio un beso a Olivia.- Nos vemos luego. -su novia asintió, le dio un beso en la mejilla a su hermana y se fue tranquilamente hacia su reunión. Marlene ayudó a Olivia a levantarse. Las dos se sonrieron.

-Te escuché cantar. -dijo Marlene. Olivia la miró confusa, buscando su barrita energética en el bolso.- Estabas cantando Girls just wanna have fun... -explicó Marlene.

-Ah, sí. -dijo Olivia, rompiendo el plástico de su merienda y mordiendo la barrita.- ¿Queréis? -les preguntó señalando la barrita. Cara y Marlene negaron con la cabeza.

-¿Sabes que llegamos a la final de coros? -dijo Cara. Olivia asintió sonriente.

-Sí, me enteré antes. Enhorabuena. -dijo después de masticar lo que tenía en el boca.

-Gracias, pero no ganaremos la final. -dijo Marlene. Olivia se sorprendió.

-Que pesimista... -dijo Olivia, casi riendo.

-Te necesitamos, Olivia. Necesitamos que cantes con nosotros, por favor. -le pidió Marlene.

-Eso, Liv. -dijo Cara. Olivia las miró sorprendida y negó.

-Que no, que no... Que vergüenza. -dijo Olivia.

-¿Vergüenza? Olivia, cantas cada dos semanas en el Buker's, no te puede dar vergüenza. -dijo Cara.

-Es diferente cantar en el Buker's que cantar en la final de coros. -dijo Olivia.- En el Buker's estoy cómoda, no me importa nada y lo hago por divertirme. En la final de coros hay una presión por el instituto, una presión para ganar...

-No, es mentira. -dijo Marlene.- Ninguno de nosotros lo hace solo por ganar. Claro que queremos ganar, pero lo hacemos para divertirnos. Escogemos las canciones que nos gustan, bailamos, preparamos el vestuario y el maquillaje. Por favor, Olivia... -suplicó Marlene. Cara y ella pusieron ojos de perro mojado y Olivia se rió.

-Por lo menos prometenos que lo vas a pensar. -dijo Cara.

-Vale, me lo pienso. Pero no os prometo nada. -dijo Olivia. Becca llegó hasta ellas sonriente.- Bec... -dijo sonriéndole a su amiga.

-Hola, chicas. ¿Qué hacíais? -preguntó Becca, cogiendo un trozo de la barrita energética de su amiga.

-Intentábamos convencer a Olivia para que se uniera al coro y cantara en la final. -dijo Marlene. Becca abrió los ojos como platos y sonrió.

-¡Vamos, Liv! Tienes que hacerlo. -dijo Becca. Olivia revoleó los ojos.- Imagínate: un vestido precioso, peinado de peluquería, maquillaje, los labios rojos, tacones, cantando, la gente aplaudiendo al ritmo de la música...

-Eso, eso... Escucha a tu amiga. -dijo Marlene.

-Chicas, me lo pensaré... -dijo Olivia. Sonrió y se fue caminando hacia atrás. Marlene y Cara suspiraron cansadas.

-No sabemos que más hacer para convencerla. -dijo Cara.

-Tiene una voz preciosa y no es justo que no la comparta... -dijo Marlene.- Becca, ¿se te ocurre algo que podamos hacer para convencerla?

-Creo que sí, pero necesitamos ayuda. -dijo Becca, pensativa.

-¿Ayuda de qué tipo? -preguntó Marlene.

-¿Y de quién? -preguntó Cara.

-En primer lugar de tu hermano. -dijo Becca señalando a Cara.- Y después de India, ella lo conseguirá.

-¿Qué pretendes hacer? -preguntó Marlene, intrigada.

-Todavía no lo tengo muy claro, pero pronto se me ocurrirá algo. Dejadme hablar con India y después lo organizamos todo...