Un
mes pasó y todo estaba mucho mejor. Austin había desaparecido de la
vida de India, no sabía nada de él y tampoco se había preocupado
mucho, porque estaba muy bien con Nick. Era un encanto, simpático y
gracioso. Se llevaba muy bien con sus amigos y a ella la hacía
sentir bien.
En
cuanto a Olivia todo seguía bien. Loreen la seguía odiando pero
Cara ya no se metía tanto entre ella y su hermano. Sebastian y ella
discutían continuamente, pero también se reconciliaban. El blog iba
viento en popa, habían decidido subir algunos vídeos y covers de
Olivia. A todos les encantaban, además de los vídeos con
sus conversaciones y sus tonterías.
Un
sábado decidieron pasarlo íntregamente juntas. Las dos, sin amigos,
ni novios, ni nada... Por la mañana fueron de compras, pero al
mediodía descansaron para ir a comer a una hamburguesería. Se
sentaron en una mesa, las dos solas, con sus bandejas delante.
-Hace
un mes que no sé nada de Austin, desde la última noche de micrófono
abierto... -dijo India, parecía preocupada.
-India,
quedamos en que no íbamos a hablar de él, que lo ibas a ignorar...
-le dijo Olivia, comiendo una patata frita de su menú.
-Ya,
pero no esperaba que fuera a desaparecer, así, de repente.
-Bueno,
estará haciendo lo qué tiene que hacer. -dijo Olivia. Después
comió otra patata y evitó la mirada de su amiga.
-Oye,
¿tú no tendrás nada que ver con eso, no? -dijo India,
desconfiando. Olivia desvió la mirada al techo y luego a su comida
otra vez.- ¡Olivia! ¿Qué hiciste?
-Nada...
-dijo ella, defendiéndose a si misma.- Sólo le dije que no querías
sufrir, que Nick era un buen chico y que te dejara en paz, que quizás
así algún día podrías perdonarlo y ser su amiga.
-Ah...
bueno... -dijo India, pensativa.- Buena intervención. Sí, sí...
-Gracias.
-dijo Olivia satisfecha.
-Oye,
mira que chico más raro... -le dijo India a Olivia, después de unos
minutos comiendo y charlando, señalando con la mirada a un chico con
una camisa negra y una corbata de color amarillo.
-¿Ahora
te gustan los raros? -preguntó Olivia, bromeando. India le dio una
patada y Olivia se rió. Después miró a aquel chico.- Sí, es un
poco raro vestirse así. Pero, mira, hay otro así. -dijo señalando
a otro chico con camisa negra y corbata verde.
-Debe
de ser una convención de raros. -dijo India. Las dos se rieron por
lo bajo.
-¡Ey,
tío! -le gritó uno a otro. Se sonrieron y se aceraron para
abrazarse.
-¿No
te huele un poco raro? -dijo el otro, gritando.
-Sí,
un poco raro.
-¿No
huele a canción? -preguntó gritando también.
-¡Sí!
-gritaron otros tres que salieron de la nada.
De
repente, cinco chicos, con camisa negra y corbatas de colores (verde,
amarilla, rosa, azul y naranja), se pusieron en medio de la
hamburguesería. Con las palmas y su voz empezaron a imitar la
canción de Happy. Olivia e India se miraron y apuraron para
sacar sus teléfonos y grabarlos. Dos de ellos hicieron la parte de
la letra y los otros los acompañaron con el ritmo.
-Because
I’m happy. Clap along if you feel like a room without a roof.
Because I’m happy. Clap along if you feel like happiness is the
truth. Because I’m happy. Clap along if you know what happiness is
to you. Because I’m happy. Clap along if you feel like that’s
what you wanna do. -cantaron en el estribillo con las
palmas. Los que estaban comiendo allí también los acompañaron con
las palmas.
-Son
buenos. -dijo India. Olivia asintió, grabándolos.
Continuaron
con la canción con las miradas clavadas en ellos y las palmas del
pequeño público acompañándolos. Cuando terminaron todos
aplaudieron y ellos se sentaron en una mesa, para comer. India y
Olivia cogieron los teléfonos y se acercaron a ellos.
-Hola,
chicos... -dijo Olivia. Todos las miraron y uno las señaló.
-¡Sois
las chicas de Red Lips! -gritó el de la corbata naranja.
-Sí,
sí... -dijo India, con una sonrisa de oreja a oreja.
-Por
eso mismo veníamos. Nos preguntábamos si podríais grabar un vídeo
con nosotras y lo subimos al blog. -les dijo Olivia.
-Claro,
será fantástico para nuestra publicidad. -dijo el chico de la
corbata verde.
Olivia
e India se sentaron entre ellos y Olivia encendió la cámara de su
teléfono.
-¡Hola
lipsteros! Tenemos una sorpresa enorme... -dijo India, mientras su
amiga la enfocaba, solo a ella.- Estábamos Liv y yo, comiendo
tranquilas en una hamburguesería, cuando, de repente, un grupo de
cinco chicos se levantaron y se pusieron a cantar. ¡Eran Colorful
Ties! -Olivia enfocó a los cinco chicos con India, en el medio.
-Hola.
-dijeron los chicos a la vez.
-Chicos,
queríamos preguntaros ¿por qué decidisteis hacer lo de hoy? Una
actuación acapella en una hamburguesería... -dijo India.
-Nosotros
somos un grupo de música acapella que se dedica a estas cosas. -dijo
el de la corbata amarilla.
-Irrumpimos
en los locales como éste, pequeños, y nos ponemos a cantar covers.
-dijo el de la corbata azul.
-Podéis
ver más de nuestros vídeos en nuestra página web o nuestro canal
de YouTube. -dijo el de la corbata naranja. Señaló con el dedo un
lugar debajo de su cabeza, donde las chicas pondrían los links para
acceder a sus páginas.
Después
de una pequeña entrevista, Olivia cortó el vídeo.
-Hemos
visto algunos de vuestros vídeos. -dijo el de la corbata amarilla.
-Yo
todos. -dijo el de naranja. Las chicas se rieron.
-Y,
entre ellos, algunos musicales... -dijo el de amarillo, siguiendo su
discurso después de que su compañero lo interrumpiera.
-¿Musicales?
Ah, sí. Las canciones. Bueno, en realidad, la única que canta es
Liv, yo cantó fatal... -dijo India. Los chicos se rieron.
-Cantas
bien, Olivia. -le dijo el de la corbata azul.- Podríamos un día
unirnos y hacer un cover juntos. ¿Qué te parece?
-Es
genial. Me encantaría. -dijo Olivia, sonriente.
-Pues
perfecto. ¿Me das tu número y te llamo para tomar algo algún día
y decidimos que cantar y cómo? -propuso el de azul. Olivia asintió
sonriente y le dio su número de teléfono. Despues India y Olivia
volvieron a su mesa a terminar de comer.
-Está
intentado ligar contigo... -le susurró India.
-No...
-dijo Olivia, haciendo una mueca extraña.- Además, tengo novio,
India.
-¡Por
eso te lo digo!
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