-No quiero discutir más, me voy a clase. -dijo Olivia, dejando a
Sebastian con las palabras en la boca. Simplemente se dio la vuelta y
se adentró en el colegio.
-¡Olivia! -gritó Sebastian, al ver que ella no contestaba ni paraba
volvió a gritar enfadado.- ¡Olivia!
-¿Qué pasó? -le preguntó Becca a Olivia, acompañándola a su
clase.
-Estábamos discutiendo. -dijo Olivia, revoleando los ojos.
-¿Primera discusión de pareja? -preguntó Becca, divertida.
-No es la primera... -dijo Olivia, casi riéndose.
-¿Por qué discutíais?
-Por culpa de su hermana y de su ex novia. -dijo Olivia.- Da igual,
ya se le pasará. Y si no lo hace se termina y punto.
-¿Cómo puedes decirlo tan fácil? -preguntó Becca sorprendida.
-Es muy fácil hablar... -dijo Olivia, dándose una lección a si
misma.
Le sonrió a su amiga y entró en su clase de Matemáticas. Esa
mañana no tenía Literatura, así que podría evitar a Sebastian.
Pero en el recreo, él la fue a buscar. Olivia, estaba sentada con
sus amigos, cuando él llegó.
-Olivia... -dijo Cory, señalando algún lugar detrás de ella con la
mirada. Olivia se giró y vio a Sebastian con los brazos cruzados.
-¿Podemos hablar? -preguntó Sebastian.
-¿Te refieres a discutir? Creo que paso... -dijo Olivia, volviéndose
a girar. Sebastian resopló y la cogió por el antebrazo. La arrastró
lejos de sus amigos, en una esquina del patio.- ¡Sebastian! -se
quejó ella, soltándose de la mano de su novio.
-No seas infantil, tenemos que hablar. -dijo Sebastian.
-Pero es que no quiero discutir. Si fuéramos a hablar no me
importaría, pero nos vamos a gritar uno al otro, dando el
espectáculo del día. -dijo Olivia, enfadada, pero sin gritar.
-Pues hablemos, entonces.
-Sabes que no somos capaces. Llevamos gritándonos el uno al otro
años, Sebastian.
-Lo intentamos. -dijo Sebastian. Olivia cedió con mala cara.- Tienes
que hacer un esfuerzo y entender a mi hermana. Es difícil para ella.
-¿Es difícil para ella que cortes con tu ex novia?
-Se lleva muy bien con ella.
-¿Y qué? Mi hermano rompió mil veces con chicas, y no solo eso, él
las destrozaba. Pero yo seguí llevándome bien con todas, no pasó
nada. -dijo Olivia.
-Pero Cara no es como tú. -dijo Sebastian, Olivia hizo una mueca y
Sebastian se alejó un paso.- ¿Sabes qué? Tienes razón, no podemos
hablar como personas civilizadas. Mejor lo dejamos aquí y punto.
Sebastian empezó a caminar de espaldas, pero no tardó en darle la
espalda a Olivia, dejándola con su mala cara y los brazos cruzados.
Olivia resopló y volvió a sentarse con sus amigos.
-¿Todo bien? -preguntó Nancy, Olivia la miró y asintió seria.
La mañana continuó, donde ambos se evitaron en los pasillos. Cuando
el timbre tocó todos los alumnos corrieron a coger sus cosas y
disfrutar de su fin de semana tranquilos. La emoción corría por los
cuerpos de todos. Olivia estaba bajando por las escaleras del primer
piso cuando vio a Sebastian en el descansillo parado y hablando con
un profesor. Quiso volver, pero era demasiado tarde, tendría que
pasar por su lado. Cuando lo hizo sus hombros chocaron porque
empujaron a Olivia.
Pero no fue a la única que empujaron. Los locos adolescentes
arrojaron a otro de ellos por las escaleras. Entonces todo se paró,
nadie caminaba más. El profesor que hablaba con Sebastian corrió a
ayudar al niño, como otros dos profesores que estaban cerca. Olivia
dio dos pasos atrás y tropezó con el pie de alguien. Para no perder
el equilibrio se agarró al antebrazo de Sebastian, todos estaban muy
sorprendidos.
-¿Estás bien? -le preguntó Sebastian, cogiendo su mano. Olivia
asintió y apretó su mano.
-¡Venga! Todos fuera. -gritó una profesora, incitando a los alumnos
que siguieran caminando.
Sebastian miró a los lados y rodeó a Olivia por los hombros. La
apretó contra él y empezó a caminar con ella bajo su brazo.
Salieron y ninguno había dicho nada. Cara llegó corriendo hacia
ellos.
-¿Qué pasó? -preguntó Cara.
-Un chico se cayó por las escaleras. -dijo Sebastian, sin parar de
caminar con Olivia.
-¿Está bien? -preguntó Cara.
-No lo sé. -dijo Sebastian.
Llegaron al donde de la carretera empezaba y los tres se pararon.
Sebastian agarró a Olivia de las mejillas, pero ella le señaló con
la mirada a su hermana, que no se había movido de su lado.
-¿Cara nos dejas un momento? -preguntó Sebastian. Cara puso mala
cara y empezó a caminar hacia la moto de su hermano, sola.- ¿Estás
bien?
-Ya te dije que sí. -dijo Olivia. Sebastian asintió.
-Perdón, por lo de antes. -dijo Sebastian.- Tienes razón, no tienes
porque aguantar las tonterías de Cara. Es mi hermana, no la tuya.
-Da igual. Pero intenta que no me clave un cuchillo en el medio del
pecho un día de estos. -dijo Olivia. Los dos se rieron y Sebastian
se acercó para besarla. Hasta que Olivia puso una mano sobre la de
él.- Ve con ella, no quiero que me odie más.
Sebastian sonrió y le dio un último beso antes de irse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario